La vida de Antonio no ha sido fácil. Cuando era un bebé, su padre abandonó a su familia para irse con otra mujer. La madre de Antonio tuvo que emigrar a otra ciudad para poder satisfacer las necesidades de su hijo y allí conoció al hombre que Antonio siempre creyó que se trataba de su padre biológico. Conforme empezó a crecer, notaba en su pueblo un cariño especial por parte de ciertas personas como, por ejemplo, la dependiente de una tienda de golosinas de la que siempre salía con algún regalo.
Al tiempo y por un descuido de su prima, descubrió que aquellas personas eran parte de su familia paterna y que, el hombre que siempre había considerado su padre realmente no lo era. Tras conocer su origen, su relación con su familia paterna comenzó a afianzarse aunque su padre nunca quiso saber nada de él. Después de pensar que todas las incógnitas de su vida se habían resuelto, su abuela le desveló un nuevo secreto: tiene una hermana por parte de su padre en paradero desconocido. Antonio quiere encontrarla y conocer su versión de los hechos.