Alejandro Lamas se ha enfrentado al padre de su novio y le ha confesado que la policía cree que él es el asesino de su padre. Nemo ha perdido el control de la situación, algo poco habitual en él hasta ahora, y ha estado a punto de llegar a las manos. El motivo de su desesperación ha sido que su enfermedad le ha hecho olvidarse de la declaración que hizo ante la policía, algo que podría costarle demasiado caro.