Vladimir perdió una pierna y como consecuencia de ello también su puesto en la orquesta sinfónica. Sin embargo, nadie ni nada ha podido con su pasión por la música y ahora toca en la calle: "Cuando falto algún día, la gente al día siguiente me pregunta que me ha pasado". El artista nos ha querido deleitar con su actuación en directo y Toñi Moreno no se ha podido resistir y a roto a llorar.