Antonio Miniño, vecino de Sanxenxo, Pontevedra, ha denunciado al cura de su parroquia por amenazas y por agredirle, presuntamente, tras la misa del domingo. Un episodio por el que, ahora, el pueblo pide que el arzobispado expulse al religioso.
Ha sido la propia víctima la que ha explicado cómo fueron los hechos en nuestro programa. Asegura que la tensión con el párroco venía de lejos, en concreto, de hace un año, cuando protagonizaron su primer rifirrafe.
Desde entonces, arrastran un ‘conflicto’ que parece haberse resuelto este domingo de la peor de las maneras: “Llegó a la iglesia llamándonos burros de cuatro patas”, explicaba. Unos insultos que propinó a los vecinos por la decisión que habían tomado.
Al parecer, la asociación presidida por Antonio Miniño decidió que salieran dos procesiones, la de San Roque y la de la Virgen del Carmen, una elección con la que el cura no estaba de acuerdo, ya que el quería que solo se exhibiera una de ellas.
“Al terminar la procesión, me dijo que tenía que hablar conmigo y me dijo: ‘Llevo tiempo con ganas de darte una hostia y te la voy a dar hoy'. Me dio dos hostias en la cara y yo le quise rematar, pero el pueblo me convenció de que no lo hiciera”, explicaba.
Tras ese tremendo conflicto, el vecino de Sanxenxo ha puesto una denuncia ante el Arzobispado, quienes aseguran no haberla recibido: “Estamos con la vida amargada porque no sabemos lo que nos va a llamar o a hacer este hombre”.
“El Arzobispado me dice que no tienen ninguna denuncia. Me dijeron que iban a intentar arreglarlo todo con él y a tomar medidas para que no volviera a ocurrir (..) Les pedimos que lo jubilen porque tiene 88 años, no lo queremos en esta iglesia”, remataba.