La madre de Santi Coca, tras tener que indemnizar a tres de los implicados en la muerte de su hijo: "Estos juicios no deberían decidirse por un jurado popular inexperto"
Santi Coca, de 17 años, recibió una brutal paliza a la salida de la discoteca que acabó con su vida: recibió patadas y puñetazos en la cabeza
Los implicados pertenecen a una banda criminal de Irún que tendría atemorizados a los miembros del jurado popular, según la madre de Santi Coca
A esta banda la hemos tenido que indemnizar con más 8.000 euros y salen con un regalo después de haber matado a mi hijo...", comenta Fátima
Fátima Jacine-Bacha, madre de Santi Coca, comparece durante el directo de 'Vamos a ver' para pedir justicia después de que el jurado popular haya absuelto a tres de los implicados en la brutal paliza que acabó con la vida de su hijo, teniendo éstos que ser indemnizados con más de 8.000 euros por la familia, y que sólo se haya condenado a uno de los acusados por homicidio imprudente.
Santi Coca es un joven de 17 años que fue brutalmente agredido a la salida de una discoteca por un grupo de personas. El joven murió casi en el acto y ahora, al ver que la justicia no condena este asesinato, su madre da la cara para contar la verdad de un proceso judicial con muchas dudas: "Estamos destrozados, aunque no estamos asombrados porque desde el inicio el juicio ha sido terrible..."-
"Desde la muerte del médico forense, se escapa el principal de los acusados, que seis meses antes no se dan cuenta de que no iba a sellar. Luego fallece una de las juezas, el siguiente juez con 5.000 folios cesa de ser juez antes del huicio que estaba previsto para marzo, hay testimonios falsos por partes de los testigos que juran en decir la verdad...", explica sobre algunas de las cosas que han pasado en este proceso legal. Además, Fátima añade: "El acusado tiene la impuidad de no contestar a la fiscal o a nuestro abogado...".
Una banda criminal y el temor del jurado popular
La madre del joven presuntamente asesinado por una paliza de un grupo de personas explica que todo se debe a "una banda criminal que está custodiada por la mafia rumana de Irún" y además señala que el "jurado popular tiene miedo porque son una banda muy temeraria". De hecho, Fátima Jacine-Bacha explica que "hay un testigo de la discoteca que dice que ni siquiera los conoce, pero sí los conoce, es amigo de ellos y los deja entrar libremente. Posiblemente haya visto mas de lo que dice, casi todo...".
"Hay otros testigos de los amigos de mi hijo que los primeros días cuando ocurrió, en 2019, testificaron y a los cuatro años esa información también se pierde, no se les deja a los testigos que hablen tranquilamente, están solapados por los abogados de los rumanos. Eso es mala práxis, delito y preguntas que se formulan en la audiencia", detalla la madre del fallecido. Una serie de irregularidades "hacen que el jurado popular empiece a dudar, que tampoco está preparado y tiene miedo a arriesgarse o escuchar otras pruebas que pueden ser las explicaciones de la fiscal y las constestaciones de los testigos".
"Evidentemente mi hijo no se ha ido al otro mundo por arte de magia, se ha ido por la banda criminal que la prepararon entre todos, hay un jefe que ha estado provocando todos los días, iba delante nuestro con toda impunidad, riéndose, le tuve que llamar la atención...", sentencia la madre del fallecido. Además, sobre las dudas sobre la causa de la muerte, añade: "A nivel oficial no pueden decir que es una muerte indeterminada, tenemos esas pruebas, está probado".
"A esta banda la hemos tenido que indemnizar con más 8.000 euros y salen con un regalo después de haber matado a mi hijo... estos juicios no deberían estar por un jurado popular inexperto, lo deberían llevar criminólogos, con médicos forenses y especialistas", sentencia la madre sobre el temor de las personas anónimas que deciden el crimen de su hijo.