La colaboradora de ‘Sálvame’ es pura televisión y lleva el espectáculo en la sangre. Lo lleva dando desde que salió de la segunda edición de ‘Gran Hermano’, cuando se convirtió en la primera expulsada y empezó a recorrerse todos los platós de Telecinco.
En la cadena amiga, estuvo trabajando en los espacios de máxima audiencia, como ‘A tu lado’, ‘El programa de Ana Rosa’ y el mítico ‘Crónicas Marcianas’, donde protagonizaba polémicas a diario y nos dejó grandes momentazos.
Uno de ellos fue el día que Marta López acudió al programa con una sorpresa para uno de los rostros del espacio más marciano de la televisión: se había tatuado la cara de alguien. Echamos la vista atrás para recordar tremendo telemomentazo.
La amiga de Alba Carrillo era en 2002 uno de los rostros más habituales de los platós de la cadena amiga y trabajaba en el programa estrella de las noches, el mítico ‘Crónicas Marcianas’, donde ejercía como polemista y colaboradora de la sección de ‘Gran Hermano’.
Ella había sido la primera expulsada de la edición, pero, como ocurre en muchas ocasiones, fue de las que más recorrido televisivo tuvo de ‘GH 2’. Era única generando momentazos y uno de ellos lo dio hace justo veinte años.
Nada más empezar el programa, la colaboradora se subió a la mesa de ‘Crónicas Marcianas’ y descubrió el ‘tatuaje’ que se había hecho y que llevaba oculto debajo de la falda. “Hace tiempo cometí una locura y me hice yo también un tatuaje que nunca he sido capaz de enseñar y que hoy quiero que todos veáis”, dijo ella.
Fue entonces cuando la colaboradora, mirando a Javier Sardá, se levantó la falda y mostró lo que llevaba en su muslo: ¡se había tatuado la cara del presentador! “Esto es por ti, cariño, para que veas que nosotros también te queremos”, le dijo la colaboradora.
Todo el plató estalló en carcajadas al ver que Marta López llevaba a Javier Sardá en su pierna. Eso sí, no es que se hubiera sometido a una larga sesión de aguja y tinta, sino que lo que llevaba era una calcamonía. ¡Menuda cara se le quedó al presentador!