El clan de Tamara fue tan lejos que, además de copar protagonismo en todos los programas de Telecinco allá por el año 2000, también fueron imagen de las más surrealistas presentaciones. El trío que siempre estuvo mal avenido unió sus fuerzas para un buen día inaugurar una frutería en el castizo barrio de Vallecas. Un documento gráfico histórico que no tiene desperdicio.