La inauguración que los unió

A finales de los 90 una inauguración de un restaurante fue el motivo por el que se encontraron por primera vez Kiko Matamoros y Makoke. Su feeling fue más que evidente desde aquel primer momento y, desde entonces se convirtieron en el 'pack' indisoluble que no podía faltar en presentaciones y eventos.

La llamada que desató la primera crisis

Su primera etapa más alejada de las cámaras resultó la más estable. Hacían todo juntos y eran asiduos de la noche madrileña sin que esta les llegase a confundir. Nada hacía presagiar que la primera de las crisis estaba por llegar, pero unas vacaciones de Makoke con amigos en la playa y una llamada de un tipo desconocido que interceptó Kiko fueron los motivos para que el dolido colaborador de 'Sálvame' hiciera unas declaraciones incendiarias en televisión. Así descubrimos que no era todo de color de rosa en el la pareja modélica, pero afortunadamente aquel bache lo superaron con éxito.

Makoke, el mejor apoyo en las operaciones de Kiko Matamoros

La primera crisis sacó las sombras de la pareja, pero ellos volvieron a mostrarse felices y contentos en los programas de televisión. No había que preocuparse todavía por Kiko y Makoke. Es más, la modelo se convirtió en la portavoz de Matamoros cuando este comenzó a someterse a sus múltiples operaciones y preocupada se desvivía en cuidados y buenas palabras hacia él en televisión. Volvían a ser el tandem unido que se cuidaba y amaba ante las adversidades.

El periplo de pedidas en televisión

A partir de aquí llegamos a los momentos de mayor exaltación del amor de la pareja. Kiko y Makoke se aficionaron a la adrenalina de las pedidas de mano en directo y en varios programas tales como 'QTTF' o en 'Sálvame', Kiko Matamoros hincó rodilla con más o menos éxito. Lo curioso de aquellos tiempos era que por más que anunciaban sus deseos de casarse no llegaba a materializarse la fecha de la boda y eso era algo que a Makoke le tenía preocupada. Ya casi se veía como la novia cadaver...

La boda que nunca llegaba

Tras tanto esperar Kiko y Makoke en otra entrevista para 'Sálvame Deluxe' anunciaron que se casarían en 2016. El plató se vino abajo, pero aquella ilusión del principio con los meses se fue diluyendo. El tiempo pasaba y no había noticias de los preparativos. Planeó la duda del montaje entre los propios compañeros de Kiko Matamoros y ellos tuvieron que defenderse en varios capítulos a previo pago en los Deluxes. Finalmente, después de muchos años y de pasar por diferentes realities (tanto Kiko como sus hijos) anunciaron la esperada boda para el 16 de septiembre de 2016.

De nuevo las maletas en la puerta

La organización de la boda del año no tuvo ningún desperdicio ni secreto para los espectadores. La pareja se encargó de ir contando detalles a base de exclusivas y de ir dando pildoritas informativas (salvo el vestido de la novia) en diferentes declaraciones y programas. Sin embargo, con todo el operativo en marcha todavía le quedaba una tormenta más a la pareja antes de llegar al altar. Kiko y Makoke entraron en una nueva crisis por los continuos rifirrafes familiares y, en especial por el enfrentamiento con Diego Matamoros. La ilusión del enlace se vino abajo y todos vimos peligrar la famosa boda. Por fortuna volvieron a superar el bache y siguieron con la fecha adelante.

¡Llegó la boda!: El enlace de la discordia

Y después de hacerse mucho esperar, Kiko y Makoke se dieron el 'sí, quiero' en la fecha prevista en una boda con numerosos conflictos y topos que tuvo cola para meses. La ceremonia se celebró en medio de una gran polémica y con la ausencia de Diego y Laura Matamoros, en parte, por la mala relación que tenían con la actual esposa de su padre. El distanciamiento entre ellos parecía insalvable. Sin embargo, eso no fue impedimento para que los novios estuvieran radiantes. Makoke lució un vestido espectacular de Pronovias y tres metros de cola y Kiko el clásico de tres piezas. Hubo discurso por parte de la hija común de la pareja que emocionó a los novios y mucha fiesta que se alargó hasta las siete de la mañana para los 240 invitados en una boda con todo lujo de detalles.

Tensiones familiares

Los últimos tiempos no han sido fáciles para la pareja. Ni para Kiko ni para Makoke. La guerra entre familias se recrudeció y, aunque Kiko Matamoros limó asperezas con su hija Laura al convertirse en madre, el enfrentamiento con su hijo Diego se hizo más intenso tras la boda de este. Todos opinaban y hasta Marián (la ex mujer de Matamoros) intervino después de muchos años alejada de la televisión para dar su visión y desmarcarse del conflicto. Kiko y Makoke iban derechos al abismo y tras su última aparición juntos el 4 de agosto en Marbella y de poner a la venta la residencia de la pareja se daban los primeros pasos para una decisión que a todas luces parecía inevitable.