María Aguilar es uno de los grandes personajes televisivos del momento y esa fama se la debe a su participación en dos ediciones de ‘La isla de las tentaciones’. La guapísima joven ha pasado de ser una auténtica desconocida, a acumular miles de seguidores en sus redes sociales.
Todo el mundo habla de ella y son muchos los que se interesan por conocer su día a día a través de Instagram, donde, además de hacer publicaciones sobre moda, estilo de vida y viajes, también hace alguna que otra colaboración con reconocidas marcas publicitarias.
Podríamos decir que la protagonista de ‘La isla de las tentaciones’ es toda una influencer, algo que abalan sus más de 340k followers. Sin embargo, pocos recuerdan a qué se dedicaba la joven antes de dar el salto a la fama.
La todavía novia de David Vaquero tuvo una historia en el pasado con Álvaro Boix, algo que ellos mismos contaron en su reencuentro en ‘La isla de las tentaciones’. Se estuvieron conociendo durante cinco días en Málaga y, después, continuaron en televisión.
Fue tras su idilio de una semana cuando el ex de Rosario Matew se decidió a acudir al programa ‘Baila conmigo’ de Cuatro, donde recibió a varias pretendientas, entre las que estaba María Aguilar, que llegaba dispuesta a reconquistar al joven y a retomar la historia que habían tenido tiempo atrás.
La joven tenía las ideas muy claras, no tenía ningún miedo y estaba dispuesta a darlo todo para irse de la mano del hombre que reinaba en el formato de citas de Nagore Robles. Allí, en un vídeo de presentación, la pretendienta contó aspectos de su vida.
Contó que llegaba de Málaga, que tenía 22 años y que llevaba soltera seis meses. Explicó que era “una persona bastante directa, muy intensa, bastante celosa” y que tenía cierta debilidad por los chicos “cañeros, altos y morenos”.
En ese vídeo de presentación, la joven también contó a qué se dedicaba antes de lanzarse de lleno al mundo de la televisión: “Soy estudiante de derecho”, confesó. Unos estudios que decidió aparcar para dedicarse a lo que le gusta: la televisión y las redes sociales.