La casa de ‘Gran Hermano VIP 8’ está de lo más animada y parece que los concursantes ya empiezan a dejarse llevar de lo lindo y a mostrar sus sentimientos sin corazas. Ese está siendo el caso de Luitingo, que está despuntando como uno de los protagonistas de la edición por su acercamiento con dos mujeres de la casa.
El cantante está cada vez más cerca de Jessica Bueno y Pilar Llori y son muchas voces las que apuntan a que podría estar formándose un triángulo amoroso. Una trama de lo más pasional que, de ir consolidándose, nos daría muchísimos titulares.
Y, de este triángulo, hay un vértice que sabe mucho de titulares y, sobre todo, de generarlos. Hablamos de Jessica Bueno, quien ha tenido varias relaciones sentimentales con rostros muy conocidos del panorama nacional.
Todos saben de sobra que tuvo una relación de lo más mediática con Kiko Rivera, al que conoció en ‘Supervivientes 2011’, pero ¿recuerdas quién fue su primer novio famoso? ¿Y la primera vez que escuchamos hablar a la modelo? ¡Tenemos las imágenes!
Allá por 2010, una jovencísima y anónima Jessica Bueno saltaba a los medios de comunicación por unas fotografías que evidenciaban un tremendo bombazo. Era verano y, tal y como pudieron confirmar unas instantáneas, la sevillana estuvo muy bien acompañada por un deportista de lo más conocido.
Ella y Feliciano López disfrutaron de unos días juntos en la playa y los paparazzi consiguieron captar unas imágenes en las que se les veía de lo más acaramelados. Hay que decir que, por aquel entonces, hacía poco tiempo que el tenista había roto con María José Suárez.
El deportista estaba rehaciendo su vida, no cabe duda y, a raíz de esas fotos, Jessica Bueno pasó del anonimato a ser uno de los rostros más perseguidos por la prensa. Eran muchos los periodistas que la seguían en cada uno de sus eventos, algo que a ella no le gustaba mucho.
Cada vez que salía de un desfile o una sesión de fotos, la por entonces novia de Feliciano López se encontraba con un grupo de cámaras que estaban esperando sus primeras declaraciones. Sin embargo, ella se mantuvo bastante cauta al principio.
No quería hablar, prefería mantenerse al margen y sus primeras palabras fueron para hacer una petición al programa ‘Sálvame’: “Por favor, ya, dejadme tranquila”, dijo muy seria y con la paciencia al límite.
Lo que ella no sabía es que aquellas palabras no la mantendrían en el anonimato ya que, tras confirmarse su relación con Feliciano López, siguió siendo un personaje de lo más seguido por la prensa y fue protagonista de polémicas de lo más mediáticas.