El partido podía decantarse tanto a Polonia como a Suecia, al final fue para los segundos gracias a un golazo de Claesson en los minutos finales. Un tanto que suponía mucho más que una victoria, el gol hacía que Suecia sería primera del grupo E mandando a España a la segunda posición tras su goleada a Eslovaquia.
Suecia comenzó ganando 2-0 con un doblete de Forsberg, el primero fue a los 82 segundos del partido, convirtiéndose en el segundo gol más rápido de la historia de la Eurocopa. En la segunda parte, fulminó la red de Polonia tras un contragolpe perfecto. Lewandowski consiguió también anotar dos tanto para empatar el partido pero su esfuerzo no sirvió para evitar la derrota de su selección.