Croacia dio mucha guerra a España, pero no pudo pasara a cuartos de final. Los ajedrezados se quedaron fuera de la Euro 2020 y Luka Modric, que obviamente acabó entristecido, se dirigió a la grada donde se encontraba su familia. Allí le esperaba una bonita sorpresa.
Los aficionados dedicaron una ovación a su capitán de esas que perduran en la memoria, reconociendo el intenso esfuerzo que había realizado. Además, Modric se llevó el abrazo de sus tres hijos: Ivano, Ema y Sofia.
Croacia abandona así una Eurocopa en la que han demostrado que sigue quedando mucho de aquel equipo que fue subcampeón del mundo en Rusia 2018. No pudieron superar a España, pero sí consiguieron meter el miedo en el cuerpo a un combinado que iba ganando 1-3 a falta de cinco minutos.
España se medirá ahora al ganador de la eliminatoria que enfrenta a Francia y a Suiza. El choque se jugará en San Petesburgo y decidirá qué equipo pasa a semifinales.