Alemania tiene las cosas claras en ataque y lo demostró ante Letonia. Si las cosas le salen bien, es muy difícil de frenar. Timo Werner salió en la segunda mitad y quiso unirse a la fiesta del gol nada más empezar. Letonia respondió con el tanto del honor con un gran disparo desde fuera del área, pero fue un espejismo porque a los pocos segundos llegó el gol de Sané.