Además de su proyecto solidario en Gambia, Ana y Raquel quieren traer de vuelta la confección a Galicia. También, quieren trabajar con las mujeres que viven en el país africano para que sean dueñas de su trabajo y de su futuro: “Queremos que con su materia prima, que es exquisita, tengan una continuidad y que los niños puedan aprender”, ha comentado una de ellas.