Pol es un chico de 30 años que colmó de felicidad a su familia desde que llegó al mundo en el año 1994. Cuando Pol nació lo hizo antes de lo esperado y tuvo que pasar algunas semanas en una incubadora. Cuando los médicos le realizaron pruebas al pequeño se dieron cuenta de que el bebé no tenía ninguna enfermedad, pero sí había nacido con un cromosoma de más: Pol nació con Síndrome de Down. Con el paso de los años, Pol creció y se convirtió en un joven activo, deportista y también en un gran amante de la música.

Su madre, Mercè, trabajó durante años en una peluquería de San Cugat del Vallés, en Barcelona, y fue allí donde conoció a una pizpireta chica llamada María que siempre que iba alegraba el salón con su simpatía.

Un día, mientras Mercè veía la televisión, María apareció actuando. Casi no podía creerlo, esa chica andaluza tan agradable que visitaba su peluquería desde hacía años era una gran artista.

Cuando Mercè le mostró a su hijo Pol las canciones de María, más conocida como La Mala Rodríguez, el chico quedó fascinado al instante. Desde ese mismo momento La Mala se convertiría en su cantante favorita llegando incluso Pol a aparecer en uno de los videoclips de la artista.

Ahora, Mercè quiere darle una sorpresa a su hijo con la ayuda de La Mala en uno de los momentos más complicados de la vida de la familia tras la muerte del padre: “Pol y su padre estaban muy unidos, lo hacían todo juntos, aún nos estamos acostumbrando a estar sin él. Cada noche salimos juntos al jardín para mirar la estrella en la que está Javier y desde la que nos cuida”.