Los saltos de alegría y la euforia de 'Los Huertanos' tras hacer pleno y acertar la última palabra: "¡Vamos!"

‘Gatos jugones’ es el equipo visitante de hoy en ‘Reacción en cadena’ y tienen como único objetivo aparte de pasarlo bien, eliminar a ‘Los Huertanos’.

Lauri, Sonia y Joel vienen directos desde Velilla de San Antonio, un pueblo de Madrid. Los concursantes son tres amigos, aunque Lauri y Sonia además, son familia, hermanas en concreto.

Conociendo más a los concursantes visitantes, Lauri y Sonia nos contaban que trabajan juntas en unos grandes almacenes, pero en distintos departamentos: “Desayunamos todos los días juntas”, apuntaba Sonia. En ese momento, Ion Aramendi comentaba si querían pedir un aumento de sueldo y ellas y todo el plató al unísono se unía a la petición de las concursantes.

Joel, el otro integrante de ‘Gatos jugones’ nos sorprendía explicando que él comenzó siendo basurero mientras estudiaba ingeniería de software y que ahora, aunque ya trabaja de informático, dos días a la semana sigue retirando basura.

En la prueba ‘una lleva a la otra’, los ‘Gatos jugones’ nos contaban en qué se gastarían el dinero del programa. Sonia confesaba que se había casado hace cuatro meses, pero que le gustaría repetir el viaje de luna de miel. Lauri quiere viajar al Caribe una larga temporada: “Me gustaría estar un mes”. Por último, Joel, busca visitar Disneyland Tokio.

'Los Huertanos' eliminan a 'Gatos jugones' en complicidad ganadora

Durante complicidad ganadora, el equipo visitante comenzaba a jugar. Lauri, Sonia y Joel no lo hacían nada mal para ser su primera vez en el programa y lograban acertar ocho palabras. Cuatro palabras más que los ‘Gatos jugones’ adivinaban ‘Los Huertanos’, que una tarde más, volvían a ser los vencedores y eliminaban al equipo visitante.

Con un total de 124.000 euros, el trio murciano llega a 'la última cadena'. Los concursantes, que han adquirido una gran destreza, alcanzaban 'la última palabra' con unos grandes 31.000 euros. Sin embargo, se veían obligados a utilizar el eslabón misterioso por la complejidad de la palabra y menos mal, gracias a esto, adivinaban la palabra y sumaban a su bote 15.500 euros.