La convivencia y la tensión de la competición de ‘Next Level Chef’ ya ha generado alguna rivalidad y conflicto entre los concursantes: Melisa sigue con su particular enfrentamiento con Skander, del que dice que desprende demasiada testosterona; por su parte, Alberto aventurará cuál es la primera pareja que podría surgir entre fogones. Entretanto, Noelia sigue esforzándose por adaptarse a las pruebas pero continúa sin comprenderlas en su totalidad, pese a reconocer que está muy centrada.

En el programa de este miércoles, se enfrentarán a tres nuevos desafíos que pondrán a prueba su habilidad en la cocina. En el primer reto de la noche no habrá expulsados, pero sí un premio para el mejor: repartir los niveles de cocinas en la siguiente prueba. El azar decidirá en qué nivel realiza cada uno de los concursantes este primer reto, que consistirá en poner en práctica tres cortes básicos e imprescindibles en la cocina: juliana, brunoise y concassé. Además de ejecutar los cortes de forma perfecta, deberán acertar con las cantidades que trocean. Para guiarles, los tres mentores del programa, Francis Paniego, Rakel Cernicharo y Marcos Morán, participarán en el desafío con una espectacular lección de corte en la que demostrarán su increíble destreza con el cuchillo.

En el segundo cocinado, los concursantes encontrarán en la plataforma diferentes ingredientes de repostería, excepto uno, el azúcar. Tendrán 60 minutos para elaborar un dulce con el edulcorante que mejor se integre en su plato. En el transcurso de la prueba, Bruno y Alberto se decidirán por el mismo edulcorante y pelearán duramente por quedarse con él.

Desde Cáceres, el chef Toño Pérez (tres Estrellas Michelin) visita las cocinas de ‘Next Level Chef’ para supervisar a los concursantes en el último desafío: preparar un plato libre con cerdo como ingrediente principal. Francis Paniego se sumará al reto y mientras los concursantes trabajan en el ático, el chef realizará la prueba en el sótano.