El duro testimonio de Mari Carmen, arruinada por su marido: "Se ha ido dejando todas las deudas a mi nombre"

Mari Carmen tiene 70 años y de la noche a la mañana descubría que su marido le había dejado 3 millones de euros en deudas. Lo que ella no sabía es que él pedía préstamos hipotecarios y créditos a su nombre, todo estaba avalado con sus bienes.

Mari Carmen y su marido se casaban en rédimen de separación de bienes, pero terminan construyendo juntos una Sociedad Limitada, para ponerla en marcha necesitan hacer el trámite que lo cambia todo. Ella firmaba unos documentos que no sabía que era un poder que autorizaba a su marido a hacer lo que quisiera con sus bienes, algo que ella nunca sospechó, hasta que termina descubriendo la verdad.

'TardeAR' ha hablado con Mari Carmen en directo para contar el drama que está viviendo: "Me siento muy mal, no pensaba en mi vida que me fuera a pasar esto. Me siento fracasada como mujer, como esposa, como madre. He tenido una vida cómoda, he estado toda mi vida ayudando a mi marido y a mi hijo, ahora me veo sola en casa porque se han marchado los dos dejando todas la deudas a mi nombre, incluso amenazándome, que si todo esto salía a la luz iba a mandar que me mataran, pero no se iba a manchar él las manos de sangre, pero que no me iba a quedar reconocible ni el dedo gordo del pie".

Además, aseguraba que su hijo se marchaba de su casa porque su padre le está manteniendo mientras que ella quiere que trabaje porque tiene 28 años. "Llegará un momento en el que se arrepentirá de todo esto. Hace un año que le llamo todos los días, no me coge el teléfono, le mando WhastApps y le pide una explicación de que tiene en mi contra, pero no recibo respuesta de él", relataba muy emocionada, asegurando que solo quiere que sepa la verdad y advertirle de lo que le puede hacer su padre: "Le tiene metido en empresas y le está haciendo lo mismo que a mí".

También nos relataba que tiene la pensión embargada por las deudas que le ha dejado su marido, como tiene embargada la cuenta del banco y que ha tenido incluso que vender su coche. Y es que lloraba al verbalizar que nunca hubiera sospechado esto: "Desde el primer día que me conoció siempre me decía que era el nombre más feliz de su vida, ha tenido una buena interpretación conmigo durante 40 años".