La que fuera concursante de la octava edición de 'Gran Hermano VIP', Laura Bozzo, vivía ayer tarde, probablemente, la situación más límite desde que la presentadora decidiera emprender esta nueva aventura en Madrid . Tal y como ella misma ha contado en exclusiva a 'TardeAR', la que podría haber sido víctima de un presunto atraco, se disponía en aquel preciso momento a sacar dinero en un cajero próximo a Tirso de Molina.
"Llevé a mi hija para que se hiciera un tattoo en la cadera y, bueno, no se podía pagar con tarjeta (...) Yo fui al cajero y cuando me puse para sacar el dinero, un joven con un aspecto horrible, se puso detrás mío. Tenía unos ojos, no sé, de drogado... En ese momento, que yo veo a este hombre detrás mío, me volteo, lo miro a los ojos y empiezo a gritar: "¡Qué carajo te pasa!"", relata la también presentadora de origen peruano.
"Salió una señora a ayudarme, inmediatamente vino donde mí (...) Entramos en una cafetería, este hombre entró a la cafetería, hasta que una persona mayor, el dueño, salió diciendo que iba a llamar a la policía. La verdad es que me pegué un susto horrible (...) Pero no sé quién se asusto más, si yo que me asusté o él con mis gritos", concluye.