Madrid fue el epicentro del rodaje de ‘Way Down’, película dirigida por Jaume Balagueró y protagonizada por Freddie Highmore. La película trata sobre un atraco al inexpugnable Banco de España, por lo que los protagonistas tienen que moverse en escenarios tan conocidos como la plaza de Cibeles, el Círculo de Bellas Artes o la Biblioteca Nacional.
Estas escenas no están hechas en estudio, sino en las mismísimas calles de la capital, lo que supuso un verdadero reto para el equipo. Primero, por conseguir los permisos necesarios para cortar el centro de Madrid durante toda una jornada. Después, para grabar todas esas escenas en solo un día y sin contratiempos.
Para Freddie Highmore, Madrid “es un personaje más de la película” y a José Coronado le impresionó que se pudieran cortar algunas de las zonas más concurridas de la capital. “Esto va a ser muy bueno para nuestro cine y también para nuestra ciudad”, dice que pensó entonces.
Los atracadores aprovechan un momento de máxima vulnerabilidad para lanzar su asalto al Banco de España. Ocurre durante el año 2010, en los días en que España iba a jugar la final del Mundial de Sudáfrica contra Holanda.
Para ello, no solo había que cortar el centro de Madrid, Cibeles y sus alrededores, sino también coordinar a los miles de figurantes que iban a vestirse con la camiseta de La Roja para recrear los nervios y la euforia de esos días.
Todo salió a pedir de boca. Cada detalle estaba medido al milímetro y se pudo completar el rodaje en ese día.
La idea de ‘Way Down’ partió de la leyenda del Banco de España, uno de los más seguros del mundo y de cuya seguridad poco se sabe. La leyenda dice que hay un depósito de agua debajo de la fuente de la Cibeles que inunda la caja fuerte en el momento que alguien intenta acceder a ella. Con esta idea juega la película. “Yo creo que es un sueño recurrente en cualquier mortal, un día poder robar un banco”, dice José Coronado.
“Es una película que parte de una llamada a la aventura. Me vinieron los productores muy entusiasmados con el proyecto, que era complicado y muy ambicioso, y yo me dejé llevar por la aventura. Porque siempre es mejor”, recuerda el director Jaume Balagueró.