De entre todos los microrelatos que nos habéis enviado durante estas dos últimas semanas hemos seleccionado a los diez mejores que han ganado una camiseta firmada por Luís Tosar y la novela en la que esta basada la película de 'Celda 211'.

Los diez ganadores

'Grouchomarx' : ¿Cómo escaparía de una celda? 211 veces lo he intentado y creedme que no es fácil. Cuando era más joven lo intenté cavando túneles con cucharas y saltando el muro con una pértigas que hacía con palillos, ahora uso la tecnología como MacGyver, no salgo de fuga sin el Tomtom. La última vez que me fugué acabé en Soria y tuve que volver a prisión a por mi manta porque por las noches refrescaba.

'sexvicios': El transcurrir de los días iba mermando mi capacidad física pero, a la vez, agudizaba mi ingenio a la hora de pensar en alguna forma de salir de esta prisión. Las marcas en la pared de mi celda indicaban un total de 211 días...sin duda era el momento de probar algo de lo que se había creado en mi cabeza: por eso inicié un proceso autodestructivo que consistía en castigar mi maltrecho cuerpo con contusiones diversas provocadas por lo poco que tenía al alcance de la mano. Después de ver el lamentable estado al que llegué, decidieron trasladarme a la enfermería...donde, sin nada que perder, opté por arriesgarme y esperar el momento oportuno para deshacerme del personal médico de guardia y asi poder utilizar su vestuario y escapar. El intento era loable, pero pronto volvería a esa repulsiva prisión y, esta vez,...PARA SIEMPRE!!.

'dogma70': Estoy metido en este chabolo 211 días, pero hoy me escapo todo lo que tengo es que hacerme el muerto y cuando entren en la ceda los guindillas me meteré la pastilla que me dio el \"aspirina\",que es un hacha para los medicamentos, y me a dicho que con estas te quedas casi fiambre, te bajan las pulsaciones tanto que casi no se aprecian, y cuando me pasen a la enfermería me pirare como un pajarito.

'El amanecer se presentaba igual que tantos días en la celda 211, pero Julián no estaba dispuesto a permanecer ni un solo día mas entre las cuatro paredes de su celda, por lo que había sobornado a un funcionario corrupto que durante su salida al patio le permitiría una escapada en el camión de alimentación. Mario el chofer estaba avisado el preso de la 211 se ocultaría en los bajos del camión pero todo no sería fácil porque su compañero de celda un tal José Antonio también quería huir, Pero Julián estaba dispuesto a todo. Llego el momento y logro subir a los bajos del camión y aunque su visión era dificultosa ya podía ver la libertad y respirar después de haber huido de la temible celda 211. utrerajmmira':

'aferrer' : Lunes por la tarde...estoy en mi celda número 211, con mi compañero, pensando y pensando la manera de terminar con todo esto. Cuento los días que me quedan encerrados en esta celda, son 211 días, qué casualidad, igual que el número de mi celda. Éste es mi día-pienso-Le explico mi plan a mi compañero para que me ayude...simularé un brote psicótico. Empezaré a delirar, me agitaré, veré alucinaciones, oiré fantasmas...Mi compañero llamará al funcionario. Dos policías me llevarán a Urgencias del Hospital público, repleto de enfermos, con horas de espera en urgencias, caos, nervios, desconcierto...aprovecho para escaparme entre la multitud! Cuando estoy solo me doy cuenta de que todavía sigo esposado ...no importa, ya encontraré algún amigo chapucillas que me las rompa y seré libre!

'ciberlaxe': yo aprovecharía una distracción de los guardias para escapar de la celda y esconderme entre los techos falsos o algún hueco donde no me pueden encontrar, y mientras estoy escondido que mis compañeros me ayuden con comida y bebida para poder permanecer escondido y que no me descubran los guardias mi entras desde mi escondite buscaría alguna zona alta como una torre de vigilancia abandonada o algún sitio alto donde no pasaran los guardias y allí me construiría un ala delta, con materia que mis amigos presos me fueran pasando para construirlo cuando lo tuviera echo y de noche amparado por la oscuridad me echaría a volar y salir fuera de los muros de la prisión donde recuperaría mi ansiedad libertad

'vrna' : Yo me escaparía de la celda de una manera muy peculiar, estoy encerrada en la celda numero 211, arrancaría los números de la celda y con los números haría unas mini sierras con las que serraría los barrotes de la celda.

'vbranco' : Primero establecería todos los cambios que podría realizar en mi físico a todos los niveles. Cuando los hubiera hecho uno a uno modificando mi corte y color de pelo, el peso, la forma de caminar, de hablar, el acento solicitaría ropa médica a mis familiares para poder participar en los carnavales y me haría pasar por una médica el día que tocara revisión de presos. La idea es que no me reconocieran y poder pasar desapercibida hasta la salida de la cárcel.

'elmaki123': Me despierto de repente sin saber donde estoy, mis sabanas están repletas de sudor, siento un frío que no es propio de la estación en la que estamos, miro hacia un lado y otro y solo veo suciedad, a mi lado está un viejo con una camiseta que pone el número 211, no se que significará, Me mira y solo hace sonreír, dejando tras de si un semblante más aterrador si cabe. Tengo que intentar escapar como sea, A mi compañero mejor ni preguntarle. Después de mucho darle vueltas a la cabeza no tengo mas remedio, que forzar un ataque o algo así. Cuando vienen a darme el desayuno ya estoy tirado en el suelo. En el momento que se acercan a ver que me pasa, le quito las llaves y su pistola y le encierro en la misma celda 211 en la que estoy. Esto es solo el principio,...ahora me queda despertarme de este sueño.

'javikambala': Celda 211', 'Celda 211!. Sabía que era su voz y sabía que iba por mí. Óscar, un amigo de toda la vida que trabajaba de funcionario en aquella prisión (nadie tenía constancia de nuestra gran amistad por el bien de nosotros), me gritó aquella frase para que me diera por aludido. Él poseía unas llaves de una puerta de salida que eran nuestra única vía para poder escapar de allí. Yo estaba encerrado en mi celda, la 211, mientras justo a fuera aquello se había convertido en una batalla campal entre presos y policías. Yo prefería seguir entre rejas que morir a balazos en aquél funesto siniestro, por eso no quise salir. Óscar estaba situado al lado de unas escaleras que daban acceso a una de las partes de afuera del edificio. Al escucharle salí de la celda de la manera más disimulada y pasando de puntillas llegué hasta donde se encontraba. Emprendimos escaleras abajo, y al salir, justo enfrente de nuestras narices vimos una ambulancia que acaba de llegar, momento que creímos oportuno para hacernos con ella y huir de allí a toda pastilla. Conseguimos fugarnos y por suerte, podemos contarlo. Eso sí, salvo que no nos apetezca pasar un buen tiempecito de nuevo en prisión, dudo que volvamos a pisar España...

¡Enhorabuena a los ganadores y gracias a todos los participantes!