Arantxa del Sol no puede esconder sus sentimientos y confiesa a sus compañeros de isla cómo está viviendo esta nueva etapa de 'Supervivientes'. Haber sido expulsada e ir a la playa en la que está Kiko Jiménez y Laura Matamoros ha supuesto un chute de energía que ella creía que nunca le iba a llegar, según hemos podido comprobar en el espacio 'Supersecretos', con Alba Renai.
Sentada en la arena, en medio de la paz de la tarde, la concursante hace balance de su etapa en el concurso y llega a la conclusión que en el mejor sitio en el que se ha encontrado es la playa en la que se encuentran Kiko, Laura y en ese momento Kike Calleja. La superviviente destaca la tranquilidad que ellos le transmiten y, lo más importante, le dejan ser ella misma y hacer actividades que en otras playas no podía por el ego de ciertos participantes.
Arantxa del Sol, al lado de la hoguera y durante el atardecer, hace una reflexión de la gran situación que está atravesando: "Aquí he hablado de cosas de las que no pensaba hablar, me he relajado, no es territorio enemigo". Laura Matamoros le cuenta: "Aquí llegáis de otra manera, te has visto más relajada y lo que tenéis allí es un territorio muy hostil".
De su convivencia en la otra playa, Arantxa destaca sus conversaciones con Aurah: "Os prometo que me encantaba conversar de estas cosas con Aurah, ella es serena, tranquila... y luego se transformaba. Pero ella es más coherente de lo que pensaba".