En esta edición tan extrema de 'Supervivientes', la lluvia es el peor enemigo de los supervivientes. Los concursantes volvieron a sufrir una fuerte noche de tormenta en la que ya pensaban que perderían el fuego. Sin embargo, a la mañana siguiente, Barranco logró avivarlo con apenas unas brasas que quedaban encendidas en la playa de los mortales y Jorge Pérez logró salvarlo en la playa de los siervos durante la noche al protegerlo estratégicamente con un tronco.