Jonathan, Pirata Olvidado, tiene una rutina diaria muy clara. Baja a la playa a coger almendras y más almendras. Hasta la propia Mahi está empezando a hartarse.
“Me tiene negra, cada día le tengo más manía. Fabio y yo no podemos ni verle. Con esto de las almendras que se lo decimos y hace lo que le da la gana… es de ser un poco egoísta. En cuatro días no quedan almendras. Estoy aquí endemoniada”, se desahogaba Mahi con Lidia.