Para la semi final del juego de líder, los supervivientes debían sujetar únicamente con sus brazos una estructura en la que colgaba un peso. Al mermar sus fuerzas, el rectángulo caía y rompía una loseta. Los semifinalistas serían los dos últimos concursantes en romper la roseta. Ana María y Hugo Sierra han sido los que más han aguantado por lo que el próximo jueves se batirán en duelo en la final del juego de líder.