Finalmente no pasó nada. El encuentro romántico entre Arturo y Tatiana no sirvió nada más que para que los dos concursantes se comiesen un pollo y bebiesen algo más de la cuente, pero nada más. Los dos concursantes durmieron juntos y no pararon de dedicarse todo tipos de caricias y arrumacos, pero nada más.
Arturo y Tatiana viajaban a Cayo Paloma y Christian Gálvez les planteaba allí un duro dilema: si pasaban la noche solos en la isla podrían degustar un enorme plato de pollo asado con patatas... o bien pasar la velada en ayunas y ceder un saco de tomates y otro de patatas a sus compañeros. Sin dudar mucho, eligieron la primera opción. Pero ni con la tripa llena los concursantes consumaron, muy a pesar de Arturo que esa noche estaba dispuesto a todo. Pero para Tatiana pesó más el respeto a su madre y a las cámaras.
Jorge Javier: Tatiana, ¿tan bueno era lo que te daban que te entraron ganas de llorar?
Tatiana: Yo con la comida soy muy feliz , Jorge
Jorge Javier: Arturo, ¿Estaba rico lo que te daba Tatiana?
Arturo: Yo quería conejo después del pollo pero no pudo ser
Tatiana: Quiero decir a mi madre que no la he defraudado. Me he comportado como una niña muy buena
Arturo: Ella me dijo que no y yo la respeté
Tatiana: No era la cuestión por principios, por mi familia, por mi madre que se me muere la pobre
Además Tatiana quiso dejar las cosas claras, a su vuelta a Playa Uva, hablando con Jeyko: Una cosas es un tonteo de risas porque estamos aquí aburridos y otro cosa es otra Lo que más me gusto fue comer. El chico me cae bien, me parece graciosa su personalidad brutota pero ya está. Yo dije desde el principio que no me iba a liar con nadie.
Parece que a Arturo la decisión de Tatiana de no acostarse con él no le había sentado muy bien y ella estaba un poco preocupada. Tú lo que tienes que tener en cuenta es que no has tenido nada y ya está. Has tenido el tonteo ese pero porque tú eres así, nada más. Y si piensas que ha cambiado porque le has dicho que no pues mira que se la machaque, le aconsejaba Jeyko.
Pero la noche de la gala terminaba de la mejor manera posible, Arturo y Tatiana se daban un piquito para limar aspereces, si es que alguna vez hubo alguna.