Aída, a Rosa Benito: "¿Crees que Ortega Cano está siguiendo tu concurso"

TELECINCO.ES 07/07/2011 10:42

Tras su expulsión, Aída Nízar Regresar a Honduras consiguió su máximo deseo: para demostrar que es una superviviente. La organización cumplió sus deseos y, sin opciones al premio, la devolvió a Honduras como elemento de castigo, es decir, cada concursante pasaría 24 horas en soledad con ella. Pero Aída no pensaba lo mismo, aseguraba que su compañía no era un castigo sino una recompensa y se mostraba dispuesta a mostrarles "el infierno" a sus compañeros en Honduras.

Pero existía una premisa principal, la norma suprema para Aída. Nada más llegar a Honduras, Raquel Sánchez Silva le comunicó que nunca podría contar a los concursantes nada de lo que ha ocurrido fuera del concurso, no pueden recibir ninguna noticia de lo acontecido en España, más aún si les afecta directamente. Por ello, la presentadora hizo jurar a Aída mirando a cámara que nunca incumpliría esta norma y la aludida lo hizo. Además, Raquel informaba de que, en caso de incumplir esta premisa, sería expulsada inmediatamente del concurso sin justificaciones ni explicaciones previas.

Parece que, hasta el momento, Aída ha cumplido su función. No le ha contado a Rosa Benito que su cuñado, José Ortega Cano, sufrió un grave accidente de tráfico en el que falleció otra persona y que a punto estuvo de costarle también a él la vida. Sin embargo, esto no le ha impedido formular preguntas que, seguramente, habrán dejado a Rosa Benito un tanto sorprendida.

Estando plácidamente en la soledad de Cabeza de León, las dos tumbadas bajo la luz del sol, Rosa Benito decía estar "tan a gustito como diría Ortega" y Aída Nízar no iba a dejar escapar la oportunidad, la superviviente preguntaba entonces a Rosa: "¿Qué tal tú con él?" y Rosa respondía como esperábamos: "Muy bien", pero Aída no iba a dejar ahí la conversación y continuaba preguntado: "Imagínate que le pasa algo a Ortega Cano", ante lo que Rosa respondía negativamente: "Dios quiera que no es muy joven y no está en los ruedos que es donde puede haber peligro" pero su interlocutora le hizo ver que el peligro no solo está ante un toro: "Ya sabes que en la vida hay peligro en todos lados, andando por la calle nos puede caer un leño".

Y, para acabar con la conversación, Aída Nízar lanzaba: "¿Sabes si está siguiendo tu concurso?" y Rosa respondió afirmativamente: "Sí, seguro que está viéndolo todo y los niños, todo, todo".