Los integrantes de Playa Limbo se han enfrentado al oráculo de Poseidón, en donde han podido resolver todas las cuentas pendientes que tengan. Es el caso de Kiko y Laura Matamoros, quien tenían y tienen mucho de lo que hablar, después de diversos choques que han tenido ya desde que los dos se encontraron por primera vez en este lugar. Cabe recordar una monumental bronca que tuvieron ambos debido al reparto de tareas en donde Laura llegó a amenazar con abandonar.
Y es que en los últimos días, ambos han vuelto a sacar el tema de nuevo. En cuanto a lo de abandonar, Lorena Morlote señalaba bromeando que "la 'cuquina' no se ha ido. Ella es como yo, no abandona y no le tumba nada". Por su parte, Laura apuntaba que no se fue porque se calmó y reflexionó mucho. Es en ese momento cuando Lorena Morlote intentaba zanjar el tema: "No lo hablemos más ni lo recordemos porque si no, no salimos".
Por su parte, Kiko Jiménez aseguraba que eso era "lo mejor para los tres". "Se entierra aquí mismo ahora, en este agujero y ya está", reiteraba Lorena Morlote pensando en el bien del equipo y de todos. Una vez llegada la noche, Laura Matamoros contaba que se pensó de verdad si irse a su casa hasta que no habló con Kiko de verdad.
Cuando Sandra Barneda les ha dado paso a los dos en el Oráculo para que explicaran cuál es su situación actual en estos momentos, Laura Matamoros ha saltado cogiendo el primer turno de palabra y con ganas de resolver las cosas y aclaras diversas situaciones: "Al final fue una discusión muy salida de tono. Hemos decidido, sobre todo yo, volver a este grupo con el que empecé. Se lo dije a Kiko. No es que no me fie, si no que creo que tiene que hacer por demostrarme para que me vuelva a fiar de él. Estamos en convivencia. No me voy a meter en esas. Nos dijimos todo y ya está".
No obstante, ha señalado que ha perdido la confianza en Kiko: "He dado muchas oportunidades en la vida a la gente. Por qué no darle una oportunidad a Kiko y que me demuestre que puedo volver a confiar en él". Por su parte, Kiko Jiménez apuntaba que le duele esas palabras de Laura Matamoros: "No hay víctima ni verdugo. Por la parte que a mi me corresponde, no soy de guardarme rencor dentro". Por último, ha dejado claro que no dijo nada con el fin de ofenderla.
Y es que lo que está claro es que para Laura Matamoros fue algo más que una discusión. Quizás hasta una traición. A pesar de ello, Kiko se ha mostrado conciliador y con ganas de arreglar las cosas. "Yo también soy humano y a mí también me duelen las cosas", aseguraba Kiko Jiménez. "Yo también me siento herido, pero no traicionado. Herido, pero curado", concluía el colaborador de Telecinco.