Arrancaba la gran final de 'Supervivientes' y lo hacía con Carlos Sobera inaugurándola desde plató y dando la bienvenida a todos los exconcursantes. Pero aún no estaban todos: "Estamos casi todos. Solamente nos falta ella. El alma de Honduras, mi querida compañera, Laura Madrueño".
Con la mejor de sus sonrisas y enfundada en un largo vestido azul, la presentadora aparecía por el pantallón. Según avanzaba por el plató, no podía contener la emoción hasta abrazar a su compañero: "Un placer encontrarte y abrazarte después de tanto tiempo".
"No me lo creo... Estar aquí, en mi casa... Qué emoción veros a todos aquí", comenzaba mientras todo el público la ovacionaba. "Mira la gente cómo está contigo", comentaba entonces Sobera. "¿Te acuerdas cuando te decíamos que menudo descomunal trabajo estabas haciendo? Esta es la prueba de que lo hacías".
Y, tras los primeros momentos de lágrimas, Laura nos contaba lo que esta experiencia ha supuesto para ella: "He pasado por muchas fases. Ha sido un viaje vital, también somos supervivientes los que estamos allí trabajando sin quitaros ningún mérito, por supuesto", decía mientras miraba a todos los concursantes.
"Ha sido un viaje profesionalmente y a nivel interior. He crecido muchísimo en todos los sentidos y aquí estoy, aterrizando todavía pero feliz, plena. He podido estar cerca del mar durante cuatro meses que es lo que más me gusta en el mundo".