Ana María Aldón no va a estar en plató en las galas y los debates de 'Supervivientes 2023' defendiendo a su hija Gema Aldón, que ha decidido que sean su prima Belén, su novio Johan Andrés y su amiga Dakota Tárraga los que desempeñen este papel. Pese a ello, la andaluza está siguiendo muy atentamente desde casa el paso de su hija por el reality y ha estado apoyándola al máximo en sus redes sociales, a la vez que ha comentado otras cosas que le han llamado la atención del concurso.
Lo que más le ha sorprendido ha sido la reacción de los concursantes al llegar a los Cayos Cochinos porque se mostraban felices y hacían palmas: "Pero, ¿adónde se creen que van? ¿Al Rocío? Que poco se imaginan el infierno que les espera. ¡Me he quedado con los ojos como platos! Se creen que van de vacaciones, ¡ay, Dios mío! Piensan que van al paraíso y no tienen ni idea de lo que les espera".
"Van a ver cosas muy bonitas como los arrecifes de coral, los peces, las palmeras con sus cocos... Pues los cocos están pegados con pegamento fuerte, eso no hay manera de que caiga. ¡Ni con un vendaval se caen los cocos, oye! Luego la falta de comida, la convivencia es tremenda con el hambre...", ha continuado enumerando Ana María, que habla con conocimiento de causa porque participó en la edición de 2020.
Tras mostrar su tremenda sorpresa por la actitud de los supervivientes al llegar al lugar en el que convivirán los próximos meses, la colaboradora de 'Fiesta' le ha pedido a sus seguidores que apoyen a su hija Gema Aldón y ha celebrado que la hayan votado como el segundo mejor salto de la noche por detrás de Adara Molinero y por delante de Ginés Corregüela.
"Lo ha hecho fenomenal, a mí me parece que lo ha hecho muy bien", ha comentado Ana María al ver a su hija mayor lanzarse al mar desde el helicóptero.