El sábado por la noche Anabel Pantoja y su todavía marido, Omar Sánchez, se reencontraban en el programa 'Déjate querer', donde ambos se sinceraron y se dijeron a la cara todo lo que sentían tras el paso por Supervivientes de la sobrina de Isabel Pantoja. Las emociones han estado latentes entre ellos, incluso ambos acabaron llorando. En el debate final del programa, Yulen Pereira ha reaccionado a estas imágenes.
Al ser preguntado por el presentador, Carlos Sobera, por la primera impresión después de este reencuentro, Yulen ha confesado que ha visto "a dos personas que estaban muy enamoradas, que han pasado cosas muy bonitas", y añade: "Creo que Anabel tiene que hablar las cosas. Es lógico y respetable". No obstante, ha reconocido que no tiene ninguna gana de ser el segundo plato de nadie.
El esgrimista se siente muy seguro con su relación. Asegura que este tipo de situaciones tienen que resolverlas entre su pareja y él, y apunta que "lo más lógico y también lo más cómodo para mí, quizá, sea que cuando yo vea el programa hable con mi chica". Momento en el que Marta Peñate, entre bromas, les invita a ver el programa en su casa. Kiko Matamoros le ha preguntado a Pereira que, conociendo a Anabel, cómo cree que le hubiera sentado que "ella hubiera sido el Yulen de esta historia", a lo que el deportista ha contestado con rotundidad que "no le gustaría, pero bueno". Además, ha confesado que las imágenes le han impactado.
Por su parte, Anabel ha asegurado que el reencuentro "fue algo bonito. Nos dijimos todo lo bonito, casi nunca nada malo". La colaboradora de Sálvame asegura que fue "chocante e impactante" y ha confesado que a ella le enseñaron en su casa que hay que pedir perdón cuando se cree que uno ha metido la pata con alguien que ha luchado por ti. Omar fue la primera persona a la que vio la prima de Kiko Rivera, según ha dicho ella misma "porque se lo merece". "Hay que dar la cara", decía segundos antes. Finalmente, le ha lanzado un mensaje desde el plató de Supervivientes: "Yo quiero que sea feliz".