Para Nacho Vidal, la experiencia de habitar la isla está siendo mucho más dura de lo que esperaba. Físicamente iba muy preparado pero psicológicamente, no. Por eso, ha hecho está reflexión a solas en plena noche: “Parece que soy el único que se siente atrapado aquí. Los demás están como en ‘Vacaciones en el mar’, se sienten felices y yo no puedo pensar en la gente que tengo fuera, en mi familia, en mis hermanos y mi mujer, a la que necesito más que nunca. Ahora les valoro mucho más”.