Carolina Sobe no se ha callado durante su entrevista. La superviviente ha confesado que lo único que le separaba de Tony era la obsesión de Nacho Montes, que llegó a dejar de comer para darle a él los alimentos. A Orinana, también presente en el plató, no le ha hecho mucha gracia que la su compañera pusiera en duda la belleza de su exnovia, provocando que ambbas mujeres se enzarzasen en un escandaloso enfrentamiento.