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Sandra Pica y Julen se han vuelto a ver las caras en el plató de 'Supervivientes' después de que la extentadora dejara definitivamente a Tom Brusse por teléfono, y tras la confesión del inquilino al asegurar que su último encuentro sexual fue con ella. Tuvieron un bonito reencuentro en plató pero también Sandra vivió una noche bastante tensa por las duras críticas que recibió de Joao.
Cuando terminó la gala cada uno se fue a casa, pero Julen se quedó un poco preocupado, por eso, decidió llamarla desde 'Solos' para ver cómo se encontraba. Sandra Pica cogía el teléfono muy tocada después del programa, "no puedo más", le decía muy agobiada con la situación, "no hagas ni puto caso ni al Maestro ni a nadie", le contestaba.
Julen le ha confesado que ha alucinado un poco cuando ha llegado al plató, y ha escuchado cómo el Maestro Joao se metía con ella, "no llores Sandra", le ha pedido el inquilino. "Es que en todos los programas y cuando no es uno es el otro y es que soy la mala, ya no puedo más, yo no me siento mala persona", le aseguraba Sandra. Solo se ha dado cuenta que ya no siente lo mismo por Tom, "yo no he matado a nadie", le ha dicho.
Julen la ha calmado y le ha dicho algo que seguro que la ha emocionado, "no me ha dado tiempo a decírtelo pero te lo digo ahora, yo voy a estar siempre ahí".
Lo que más echa de menos Sandra son las conversaciones con Julen, "el poder hablar contigo", además ella sabe que el inquilino no la juzga. Julen le ha dicho que tiene que dar tiempo a que las cosas se calmen, después lo verá con otros ojos.
Le ha recordado que tiene que pasar de los comentarios, "no son tus amigos te tiene que pelar un huevo, lo importante es lo que piense tu familia y tus amigos", le ha dicho Julen, pero sabe que ahora es muy complicada la situación de Sandra.
Inma también se ha puesto al teléfono y la ha querido tranquilizar, ella cree que se la critica porque es Sandra, si llega a ser otra chica, no sería igual.