La actriz Neus Sanz compagina su pasión sobre las tablas de un teatro con el voluntariado en un hospital. La actriz lleva años visitando a los enfermos de un hospital madrileño dentro de un programa de voluntarios y lo ha contado en exclusiva para 'Socialité'.
En una primera etapa, Neus estuvo ayudando a niños enfermos de cáncer, a ellos y a sus familias, algo que le hizo tocar fondo: "Se murió una niña a la que yo tenía mucho cariño, se llamaba Candela, cuando ella murió tuve que dejar el voluntariado porque era incluso incapaz de coger el autobús que pasaba por delante del hospital".
Después de aquello decidí cambiar de zona y empecé a ayudar en oncología de adultos y a pacientes con daño cerebral. Aunque es duro y en ocasiones sale del hospital llorando, Neus reconoce que su voluntariado le alimenta el alma: "Hacer cosas así te hace ver que podemos ser buenas personas".
Tras el reportaje, las cámaras de 'Socialité' sorprendían a María Patiño llorando desconsolada: "Yo pienso que si diésemos más a los demás nos olvidaríamos más de nosotros mismos y seríamos menos egoístas".