El futbolista del FC Barcelona ha vuelto a convertirse en noticia pero en esta ocasión para mal. El joven deportista era captado por las cámaras de televisión cuando, pese a los ruegos, se negaba a bajar la ventanilla de su coche para fotografiarse con un niño.
El fan, según explicaba la madre, llevaba una hora esperando a su ídolo y tenía que conformarse con hacerse un selfie pegado a la ventanilla pese a que el futbolista estaba parado dentro del coche y podía perfectamente bajar un instante la ventana para hacer feliz al pequeño.
Este no es el primer gesto cuestionable de Pedri con sus seguidores, ya que en varias ocasiones hemos visto al futbolista haciendo caso omiso a las peticiones de sus fans.