CAPÍTULO 16.

1. Martínez y Cata en el salón. De fondo, la sombra de Sara barriendo. Cata está leyendo 'Camino de perdicíón' (en la otra punta de la sala, se puede ver a Sara). Martínez le pregunta por Warcott y le dice que parece nervioso y preocupado. Aparece Elena.

2. Duque y Cata en el baño de un restaurante. Él le enseña fotos de dos hombres que podrían ser contactos de Cortés pero Cata no sabe quiénes son; él le explica que esos hombres controlan el tráfico del Estrecho y que Colorado hace pequeños envíos por la zona y que nunca ha habido ningún problema. Le dice que, sin ese contacto, no puede hacer nada al margen de Cortés y que, si algo sale mal, Colorado intentaría matarlo.

3. Anatoly pide a Duque, en concepto de adelanto de lo pactado, un millón de euros en tres días. Duque acepta.

4. Anatoly sale del bar de Duque y entra en un coche. Dentro está Martínez. Si Duque no cumple, Anatoly sabrá que no puede confiar en él.

5. Duque llama a un contacto en un puerto del Sur. Aún no ha llegado la merca que esperan de Colorado. Duque ordena a su contacto que espere en ese puerto, que es el más seguro.

6. Cata va al evento de la ONG a la que Cortés hace ingentes donaciones. Conoce a los hombres de la foto que le había enseñado Duque: Íñigo Armada (fundador y presidente de la ONG) y el Coronel Écija (alto mando de la Guardia Civil en el Estrecho), quien no parece implicado en los turbios asuntos de su marido.

7. Duque llama a Martínez por teléfono para anunciarle que no ha llegado el envío de "madera". Martínez le dice que ha habido problemas con la documentación de la aduana, pero que no se preocupe, que en un par de semanas lo tendrá (Duque lo necesita en tres días para poder pagar a Anatoly).

8. Cata, Écija y Armada en el evento de la ONG. Écija explica a Cata que no conoce a Cortés y que Armada es el máximo responsable de la Agencia de Control del Estrecho, la puerta de entrada a Europa de droga e inmigrantes ilegales. Cata llama a Duque.

9. Cata va a casa de Duque y le da toda la información.

10. Como no llega la mercancía, para poder obtener el dinero que deben a Anatoly, el Gitano dice a Duque que pueden trabajar con coches de lujo robados. Ha hablado con un contacto, Georgi, tres de cuyos hombres han sido detenidos, por lo que se ha quedado sin suministradores. Lo que los de Duque tienen que hacer es robar coches de lujo y deportivos, cambiarles la matrícula y el número de serie y entregarlos listos para la exportación. Georgi los pagaría al contado. Necesitan un taller. Utilizan el de Jesús.

11 . Jessi en casa de Cortés. Advierte a Cata, quien estaba en la piscina, que no haga daño a Duque. Cortés las ve, pero parece que no las oye.

12. Cata y Elena en el jardín. Sara les sirve unas bebidas. Catalina dice a Elena que quiere trabajar en la ONG, pero su cuñada le explica que se trata de una organización ficticia, que ni el 10 por ciento de sus ingresos llega a su destino. El dinero que Cortés entrega le llega de nuevo a través de empresas de servicios y de otras cosas; "Armada se queda con un buen pellizco y ya está".

13. Sara acompaña a Vane hasta Cata, en el jardín. Vane le cuenta que Duque y sus hombres se han quedado con el taller de Jesús. Cata le cuenta que ha soñado con Duque. Vane le recuerda que fue él quien mató a Jesús.

14. Duque y Armada en un restaurante. Armada no quiere hablar con él. Duque le dice que sabe cuáles son las auténticas actividades de su ONG y que tiene su ordenador (Agus y Pertur habían entrado en su despacho y lo habían robado) con toda la información, que podría llegar a los periodistas. Duque quiere información de los movimientos de la Guardia Civil en el EStrecho: zonas, vías, franjas horarias... Armada se niega en principio, pero después le dice a Cortés que no va a poder seguir haciendo negocios con él.

15. Encuentro de Duque y Anatoly. Sólo le puede dar 400.000 euros y un regalo de un kg. de coca. Anatoly se despide con la siguiente frase: "Ya tendrá noticias mías".

16. Armada y Cortés. Sara está en la habitación. Armada expone que en el Ministerio hay sospechas sobre él y que pronto van a vigilar todas sus órdenes, así que no va a hacer más negocios con él. Cortés sospecha y le dice a Martínez que "algo va mal". Éste le anuncia que Duque y Armada se han visto en el hotel; por eso, Cortés dice que "el Duque tiene que desaparecer de nuestras vidas cuanto antes". Después, Martínez ve a Cata y le recuerda una cita del libro que está leyendo: "Se derramarán más lágrimas por las plegarias atendidas que por las no escuchadas".