Mayte Soldevilla se acercó a la tumba de Begoña Cepeda para hacerle una visita. Se llenó de remordimientos por no haberlo hecho antes, pero le contó emocionada todo lo que había hecho con el dinero que le dejó en herencia. La Asociación de Mujeres está recibiendo cada vez a más miembros aunque también es cierto que está pasando por ciertos apurillos económicos.
Pero lo que no esperaba Mayte era recibir la visita de una vieja amiga. "Nuestro tiempo pasó. Ahora es el tuyo. La vida es muy corta para pasar tanto tiempo lamentándose. Coge ese bolso y sal a vivir. Te quedan muchas cosas bonitas para vivir. Y otras horrorosas porque sabemos que la visa puede ser muy p***, pero si no lo pasas, no te enteras", le dirá.
Mayte no podrá evitar las lágrimas al sentir que está postergando su vida por sus ajetreados días como madre y justiciera.
Pero si bien esta sorpresa será más que agradable, después Mayte ha tenido otra que para nada le ha gustado. Hay alguien dispuesto a hacer lo que sea para quitarle el local de la Asociación de Mujeres.