Adara rompe a llorar
Estamos fuera de hora, pero seguimos un poquito porque la cosa está que arde. Adara vuelve del cubo llorando. "Son desprecios continuos ¿Somos tan apestosos para que no se sienten a comer con nosotros? Eso no se le hace ni a un perro...Aquí hay que callarse por todo", lamenta la repescada. "Deja de llorar por gente que no merece la pena...Son gente que no son importantes en mi vida...Algunos lo eran, pero no lo tenían que haber sido", reacciona Miguel. Después Adara decide lavarse los dientes e irse a dormir. "Por lo menos me he quedado a gusto", sentencia la muchacha. En este punto, me despido ¡Buenas madrugadas!