8.00 - 16.00 | Adara Molinero confiesa que echa de menos a Rodri, su ex

Adara sigue confiando en Cristina. Le está contando cómo ha sido su ruptura con su ex y cómo lo ha vivido ella. Adara le cuenta que no es capaz de verle otra vez porque sigue enamorada: "Le echo de menos", ha dicho. Cuenta que se despidieron pero que no fue capaz ni de darle un abrazo. Cristina cree que igual él lo está escuchando y se le remueve todo. Ella solo espera que no se haya enfadado por contar cosas de él: "Le importa mucho su imagen".

Con el nuevo trío hablando en el vestidor, yo me despido por hoy. Pasad una buena tarde y seguid pegaditos al 24 horas y al Minuto a minuto, claro, para no perderos nada.

¡Sed felices!

Los Pringanui siguen haciendo la prueba sin parar. Han decidido hacer turnos, así que ahora les toca a otros porque Sandra, Julen y Lucía han terminado el suyo. La nueva tanda la hacen Fiama, Cynthia y Emmy.

En el PLUS, Cristina y Adara están en el vestidor hablando de la conversación que ha oído de Lucía hablando mal. "Otra vez, es que me agota", dice ella. A Fiama también le ha oído hacer comentarios pero no lo ha escuchado bien.

Adara le dice que parece que no están contentas de estar en la casa. Y Cris no sabe qué hacer: si tener paciencia o perderla. Adara está rayada por si fuera se está diciendo que sigue enamorada de Gianmarco. No quiere dar esa imagen fuera porque no es verdad. Cristina le asegura que no cree que se esté viendo eso.

Adara confiesa que no tiene ganas de ver a Rodri, su ex. Bueno, sí tiene ganas pero no quiero volver a empezar de cero. "Es que lo he pasado fatal. Nunca lo he pasado así por nadie", confiesa. El motivo por el que rompieron a Cristina le parece absurdo y Adara cree que no estaba preparado para que vivieran juntos.

Lucía, Julen y Sandra siguen haciendo la prueba bajo la atenta mirada de Jesús que alaba el buen trabajo de sus compañeros. El trío de la tribu se queja de que Emmy no lleva la ropa puesta todo el tiempo que debería y están cansados de decírselo.

Mientras, Luis se une a Luca y Cris en el vestidor. Cristina lleva un buen rato buscando un sujetador negro que no encuentra. Ha preguntado a varias compañeras pero nada, que no aparece.

Luca y Cristina cada vez están más juntos y ahora, con la expulsión de Miguel, más aún. Llevan toda la mañana pasando tiempo uno al lado del otro. Y aprovechan cualquier situación para estar juntos, tontear y hacer manitas. Mientras Cristina iba a poner la lavadora, Luca ha hecho un masaje en la espalda. Juzguen ustedes mismos...

Jesús comenta con Canales en el jacuzzi que él sabía que Miguel les iba a elegir para su grupo de privilegiados. Canales no se lo esperaba, como todo lo que ocurre en la casa. Y comentan que la semana que viene hara un mes que están dentro de la casa. ¿¡un mes YA?! ay madre mía...

Mientras, Cristina y Luca siguen con su pique en el vestidor. Ella le ha dejado caer que le puede hacer un regalo desinteresado cuando se vaya y él le responde: "Te estoy regalando mi tiempo". Pero Cristina rompe el romanticismo: "Claro, no te queda más remedio. Si no me lo regalas a mí, ¿a quién?".

Cristina ha oído a alguien hablar mal de ellos. Ha oído decir que hay gente en la casa que tienen el cerebro justo para pasar la mañana. Creo que se refiere a Lucía. La periodista lo tiene claro: ha perdido a Miguel pero también ha perdido la paciencia. Sí, por lo que dicen, se refieren a Lucía. Manda callar a Luca porque quiere escuchar que está diciendo. Al italiano no le importa y no le gusta estar escuchando la conversación ajena. "A mí me da rabia", dice ella. Y dice que lo único que le gustaría es que la dejasen vivir en paz.

Luca aconseja a Cristina un look para la gala del domingo. Ella pensaba ponerse un pantalón de cuadros, pero al italiano no le ha gustado nada porque quiere algo más sexy y con más estilo.

Así que le ha aconsejado que se ponga una minifalda con una camisa negra y unos zapatos que a él le gustan. Pero ella todo de negro no quiere ir.

También le aconseja que puede levar un top transparente que lleva lentejuelas y la minifalda. "Esto es fuerte", dice él mirando el conjunto. Y siguen con sus piques sobre el estilo de cada uno.

Luis repasa las instrucciones de la prueba semanal porque todavía hay cosas que no tienen claras como lo de confraternizar entre ellos. Pensaban que tenían que pedir permiso a Adara para poder hacerlo, pero resulta que no es así. Una vez con la idea clara, va a decírselo al resto de sus compañeros para que no cometan más errores.

Julen y Sandra se quedan solos hablando. Sandra le cuenta que todos los Pringanuis están todos de bajón. Menos ella, que está contenta y le da hasta alegría recoger bolas.

Mientras en el PLUS, Cristina y Luca organizan el armario entre risas porque los dos comparten una parte del armario y ella no tiene perchas porque se las ha quitado todas él. Y Luca pide una toalla grande que no tiene, y que sea azul. Aprovechando el momento, Cristina le enseña la palabra "empanado", pero no sabe explicárselo con palabras y se lo explica con gestos. Pero el italiano no lo entiende. Y siguen con sus piques por el armario.

Adara les cuenta a sus amigos que ayer, cuando fue a cambiarse en la habitación, se quitó el body y se le salió un pecho. "¡Oh no, has sacado una teta!", le dice Luca super sorprendido y con un acento italiano increíble. Adara continúa la historia y les cuenta que cuando pasó y se dio cuenta, uno de los Gemeliers estaba en la habitación y se giró como un niño pequeño. La ganadora de GH VIP se parte de risa mientras lo cuenta.

Adara y Cristina están puntuando las camisas de Luca. Al italiano le gusta llamar la atención con la ropa y tiene varias camisas con estampados imposibles. "Joyitas" como dice Adara. Se están cachondeando del armario de su amigo pero creen que es "muy italiano", que no sabemos hasta qué punto es bueno. Adara cuenta que Gianmarco también tenía varias joyitas pero no tantas y Luca dice que su hermano es más elegante vistiendo que él.

La música de la tribu ha sonado, y lo ha hecho a un volumen tan alto que reconozco que me ha asustado. Y bueno, no soy la única, Canales ha bajado el ritmo de pedaleo y todo.

Bueno, pues empiezan a recoger bolitas. Las chicas, porque Julen está desayunando y Emmy también. Deciden dividirse para hacer relevos y no cansarse tanto.

Mientras, Cris, Luca y Adara hablan de cambios de looks, cortes de pelo... También aprovechan para que Luca mejore el idioma porque todavía hay algunas palabras que le bailan y no las utiliza bien. Y otras se las inventa también.

Canales, perteneciente al grupo de los Morronui, o sea, privilegiados, lleva un rato haciendo bici. Pero un buen rato. No sé la de kilómetros que lleva pero parece que se está preparando para el Tour de Francia. Se ha levantado con energía el torero. Una hora sin parar lleva. Jesús...

Mientras Canales sigue con su ejercicio matutino, Julen ya se ha despertado y el resto sigue con sus que haceres.

Lucía hace sus cábalas de la nominación: el martes se salvan Luca y Fiama. Guarden mensaje por si acaso hay que nombrar a Lucía como la máxima autoridad del ocultismo, con permiso de Aramis Fuster, claro. Fiama sin embargo, cree que va a ser Cynthia en su lugar. Y Lucía insiste muy segura en que Fiama no se va. Y la veterana del grupo le deja las cosas claras a su amiga: no le gusta que hable tan mal de ella misma.

"Te echas mierda encima y dejas a la gente con ese concepto. Tienes de pandillera lo que yo de persona tranquila", le crítica Lucía, de buenas maneras, para que Fiama cambie. Han estado tensos esta semana, pero independientemente de eso, tienen que seguir jugando, como bien dice ella. Lucía le aconseja que piense que esto es un juego y que no es su vida. "Te pido que en la prueba no repliques ninguna ofensa y no te pierdas el respeto a ti", le dice.

Fiama asegura que cuando tiene cariño, todo bien pero si le caes mal, arrasa y pierde los papeles. Lucía ya ha tenido comentarios que no le han gustado esta mañana de parte de Cristina. Y es que en la prueba no pueden hablar entre los dos grupos, a no ser que la diosa Adara les de permiso. Y es lo que ha pasado: Cristina le ha dado los buenos días y Lucía simplemente ha hecho un gesto, pero asegura que ha sido por la prueba, no por nada más allá.

Sandra y Fiama hablan de que Cynthia está agobiada por la nominación. La concursante tuvo la mala suerte de coger el teléfono que llevaba a la nominación directa. Fiama no quiere que le calienten la cabeza, porque ella también está nominada. Y continúan haciendo la prueba recogiendo los platos y vasos del desayuno de los Morronuis.

Fiama no entiende para qué va a estar mal esta semana si sabe de sobra que no se va a ir. Sandra dice que lo que tiene que hacer es no entrar en el bucle negativo todo el día. Y siguen con sus labores de Pringanui.

Fiama comenta con Lucía que esta semana quiere estar feliz, tranquila, porque quiere irse en paz de la casa. Lucía la corrige: tiene que estar feliz para seguir en la casa. Y le dice que se prepare para quedarse, pero ella quiere irse. Y se emociona, no aguanta más: "Quiero irme a casa". Lucía le consuela y le pide que sea feliz esta semana y disfrute. "Perdí los nervios y eso no me hace bien ni a mí ni a mi familia". Fiama se sigue desahogando con Lucía.

Luca se ha despertado y se une a los chicos en la habitación naranja. Comentan la noche, un uñero que tiene Dani y la prueba. A Luca tampoco le gusta tener que pedir las cosas a los demás.

Mientras, en el PLUS, Lucía y Sandra barren y recogen la casa. Lucía comenta que el día se les va a hacer largo porque las chicas están de bajón y le advierte que coja fuerzas por lo que pueda pasar. El equipo de los Morronuis no saben qué hacer así que, descansan en la habitación.

Y Cristina le comenta a Luca que ayer alguien se durmió en la cama de Miguel que se la ha cedido a ella. Pero le ha dejado las cosas claras: esa cama es suya.

Además, el italiano cree que Gianmarco va a entrar en la casa porque Adara ha entrado también. Luca y Cristina bromean con esto y con un posible cambio de pareja: Cris con Gianmarco, Luca con Adara. Fantasía pura. Pero no hay quien separe a estos dos.

Lucía y Fiama recogen la cocina. Están deseando saber qué hubiese pasado si el grupo mayoritario fuese los Morronuis. Algo que nunca van a poder saber y Lucía, lo comenta: "Me voy a quedar con la duda".

Mientras, en el jardín, Cynthia y Sandra se quejan de que no han podido descansar porque en la habitación estaban haciendo ruido y molestando. Y justamente en la habitación naranja, Dani y Canales se tiran encima de Luis y Jesús, que siguen durmiendo o al menos, lo intentan.

El Gemelier rubio y el torero comentan que no pueden hablar seriamente con Adara porque no se entera de las cosas y pregunta lo mismo cuatro veces.

Dani y Canales no están a gusto en el grupo de los Morronuis. De hecho, Canales pidió cambiarse de grupo pero no le dejaron. Comentan con Adara que no están cómodos porque no les gusta tener que estar mandando a la gente para que les hagan sus cosas y además, creen que la prueba que les ha tocado esta semana es muy difícil.

A pesar de su mal rollo, Fiama le prepara el desayuno a Adara. Quién las ha visto y quién las ve. Parece que el grupo de los Pringanuis se ha levantado mejor y, tras las palabras de JJ, han decidido centrarse en hacer la prueba y esforzarse por superarla.

Cynthia se ha unido al grupo de la cocina, y Dani acompaña a sus compañeros en la cocina. Comentan otra vez que se ha rodo el exprimidor y Lucía lo tiene claro: el que no sepa hacer nada, que no toque nada.

Isabel se ha roto, y está llorando desconsoladamente en el jardín. Ha sido la primera en despertarse y vestirse. Ha salido a un rincón del jardín ella sola y ha comenzado a llorar. No sabemos qué le ocurre a la colaboradora de 'Ya es mediodía', y sus compañeros tampoco se han acercado porque desde donde está sentada no se la ve. Estaremos muy pendientes para saber más.

Todavía con la legaña pegada en el ojo y casi sin poder abrirlos, Lucía y Fiama preparan el desayuno. Tostadas y zumo de naranja. Mientras, Canales las mira desde la barra de la cocina en completo silencio. Parece que él también tiene sueño.

Parece ser que el exprimidor que nos aturde la cabeza se ha roto. No saben qué ha podido pasar, pero está roto. Canales ayuda a Lucía a ver si lo puede arreglar. Fiama se ha rendido y procede a hacer el zumo con un exprimidor de los de toda la vida. Canales parece que ha dado con el fallo: se le ha salido algún "pitorrito". Muy técnico todo. Y no saben arreglarlo claro.

Isabel ya se ha vestido con el uniforme de la tribu. Acto seguido, vemos por el PLUS, como sale al jardín al sol a meditar o pensar en sus cosas. La prueba ha empezado, así que Lucía se va a cambiarse. Le sirven el desayuno al torero, que forma parte del grupo de los privilegiados.