8:00 - 16:00 | Luis se viene abajo recogiendo sus cosas

¡Buenos días! La pareja protagonista de estos días, Luca y Cris, vivieron una de sus noches más difíciles. Llevan varios días que lo poco que hablan es para discutir y cuando parece que se reconcilian… vuelven a discutir. Se enfrentaron a ‘La sala de la verdad’ y lejos de llegar a un entendimiento, la tensión siguió más fuerte que nunca. Finalmente, y tras varios reproches y malos rollos, sellaron su tenso momento con un beso aunque luego siguieron discutiendo. La alegría llegó para los dos cuando Carlos Sobera anunció que Luca era uno de los salvados de la noche.

Pero para Cris la mala noche continuó un poco más. Como la Navidad está a la vuelta de la esquina, esta semana la prueba semanal será sobre esta época y, como no, también estará presente El Grinch. La audiencia tuvo la oportunidad de votar a quién ven como El Grinch gruñón de la edición y venció Cristina. No se lo tomó mal pero tampoco le hizo demasiada ilusión.

La tensión continuó cuando se enfrentó con Sandra. La periodista insinuó que su compañera lo único que hace en la casa es dormir y eso le sentó fatal. Sandra explotó y, en su enfado monumental, decidió dejarle a Cris en la cama toda la ropa que había puesto en la lavadora como símbolo de protesta. Dani y Julen salieron a defenderla porque alegan que es “muy curranta” y que no se merece que se la ataque con eso.

Conectamos con la casa para ver si el espíritu de la Navidad ha invadido la casa y las cosa se calma un poco, incluso para El Grinch.

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Jesús encuentra, por fin, la sartén

Al final, Luca y Cris le dice a Jesús que por qué no le ha preguntado a ellos. Jesús dice que le estaban viendo "jodido" y no le han dicho nada. "Eres un dramas de cocinero", dice Cris. Y le dicen que en algún momento se acabaría la broma. Cristina se sorprende de la cantidad de aceite que ha usado y mete un poco el dedo en la llaga con lo de que está más gordo y que hasta Carlos Sobera se lo dijo.

Jesús ha cogido y como no encontraba el aceite, ha hecho más en otra sartén. Pero asegura que sabía que habían sido ellos. "Has desistido muy rápido", dice Cris. Y se mean con que haya pedido las imágenes. "Si somos siete", dice. Luego comenta que la prueba es muy larga y Luis, casi a la vez, que está fascinado. Mientras, Julen nos regala unos caretos geniales mientras está vestido de reno y haciendo bici. Cositas de la prueba.

Siguen con el funcionamiento de la prueba. A Sandra le toca ir a pedir el aguinaldo al Cubo. Tiene que ir, junto a otro compañero que será Jesús, a cantar un villancico, tocar la zambomba y comer polvorones. Se visten con gorros y bufandas y se van corriendo. Sandra no sabe qué es el aguinaldo. Ofú. "No me río más con esta niña porque no puedo", dice Dani. Same.

Pues con este buen rollo de la prueba y todos cantando villancicos, yo me despido por hoy. Disfrutad de este navideño día y ¡sed muy felices!

"Voy a pedir imágenes..."

Jesús da con la clave. "La habéis cogido alguno y os estáis callando", dice. Cris, que lo oye, no dice nada y ayuda a Sandra con la prueba. Les ha tocado saltar en unas colchonetas. Parecen amigas y todo. Los demás miran cómo saltan. "Mira las dos", dice Dani. Sandra se queja de que le toca todo lo físico: saltar, hacer pesas... le faltan los burpees de El Grinch.

"Que sepáis que voy a pedir imágenes a ver quien ha cogido la sartén", dice Jesús. "Qué pesado", dice Luis. Cris sigue sin soltar prenda. La que vamos a liar con la sartén... Bueno, siguen con la prueba. Les toca hinchar tres globos con helio para pintarlos y decorar el salón.

Mientras todos están atentos en la prueba, Luca termina de cambiarse en el vestidor y de asearse en el baño.

Jesús se vuelve loco buscando la sartén

Mientras los chicos siguen jugando, Luca y Cris se dan el lote en el baño. Desde que se han levantado no se separan y no pueden parar de darse besos.

Volvemos al salón y a Sandra le ha tocado dar un par de vueltas cargada con varias cestas de navidad, un jamón... Mientras, Jesús entra en cólera porque no encuentra la sartén con el aceite. La pareja no suelta prenda. Y efectivamente, el cantante se vuelve loco porque no la encuentra. Pregunta a sus compañeros mil veces y se pone a buscarla sin éxito claro, no se imagina que está en un armario metida. "Te lo juro que me voy a volver loco", dice.

Sandra termina de hacer su vuelta y se queja de que el jamón es de verdad y que pesa muchísimo. Tiene hasta el hombro rojo del peso. Jesús sigue dándole vueltas a la sartén. Luis no se lo explica y le dice que igual la ha metido en algún sitio. Igual dan con ella. Luca y Cris siguen sin decir dónde está el tesoro guardado.

A Dani le toca escribir la carta a un excompañero y decide escribírsela a Canales. Le dice que le echa de menos y que espera que fuera disfruten de muchos momentos juntos. Jesús se acerca y le dice que ha sido el último en coger la sartén. "No me rayes con la sartén", dice él. Julen asegura que su hermano no ha sido. Pero Jesús sigue en sus trece.

¡Todos al almacén!

A Julen le toca escribir una carta de feliz navidad y decide que sea para Lucía. Le dice que espera que esté muy bien con su familia, que a él se está yendo genial y que la quiere mucho. Sus compañeros aplauden sus palabras.

Sandra tira y les toca la casilla de aglomeraciones, es decir, que tienen que coger las bolsas de la compra y meterse todos al almacén. Van a tener otro fallo porque Luca está en la ducha. al final, llega con el albornoz y le dan una bolsa de la compra para que no sea fallo. Están como sardinas en lata. Se van moviendo porque se supone que están en el metro. Luis imita la voz del metro primero en castellano y luego en catalán. Cris y Sandra se mean. La música se para y salen todos del almacén.

Dani tira el dado otra vez y ¡vaya! le ha tocado la misma casilla. Otra vez todos al almacén. Se empujan los unos a los otros y empiezan a cantar villancicos. Cuidadito con Luca que se queda en pelotas porque no le ha dado tiempo a quitarse el albornoz. Y nada, otra vez para fuera. Alguno ha aprovechado el viaje para coger chocolate.

Besitos bajo el muérdago

Siguen jugando y a Sandra le toca estar bajo el muérdago. Dani llama a todos porque le tienen que dar un beso a Sandra donde ellos quieran. Julen no se explica por qué hay que estar siempre detrás de la parejita en todas las pruebas. Dani le dice a Sandra que le va a tener que dar un beso Cris: "Que me lo de en la frente", dice ella.

Bueno pues el beso ha sido en la mejilla, igual que el de Dani. En el oído Jesús y en la boca Luis y Julen. Lo han dado todos menos Luca porque está en la ducha. Pensaban que por ser de fuerza mayor estaba exento pero la voz del Cubo les corrige y les dice que no vale, que falta un beso. Así que cuatro casillas para atrás. "Estaba seguro que te lo iba a dar en la cara", dice Jesús. "Pues nada, cuatro casillas para atrás y seguimos", dice Sandra.

A Dani le ha tocado decorar la pared y Cris le ayuda con los globos que tienen que pintar. Tienen 5 minutos para colorear y colgarlos. Dani ha decidido usar el guanto globo para hacer una gallina. "Me apetece", dice. Pues muy navideño oye.

Comienzan con la prueba

La voz les avisa de que empieza la primera partida del calendario de adviento. Juegan Sandra, Julen y Dani. Luis hará de arbitro y le toca a Sandra que le tienen que decorar porque es un árbol de Navidad. Jesús ayuda a Sandra porque los demás están jugando y no pueden. Sandra se queja de que le pica el espumillón por el cuello. Dani le mete prisa y Julen le imita. Jesús termina su tarea y Sandra tiene que aguantar 30 segundo siendo un arbolito. Sus compañeros cuentan bastante despacio todo hay que decirlo.

El siguiente turno es el de Dani que casualmente le toca la misma casilla. Jesús protesta porque es el único que puede ayudarles y necesita ayuda. "Tendrían que estar Cris y Luca", dice. "No te preocupes que cuando les toque a ellos yo tampoco voy a estar", dice Julen. Dani se viste y su hermano comienza a decorarle con las bolitas y el espumillón. "Es tu venganza Jesús", le dice Julen. Esperemos que Julen caiga en otra.

Besos en cada rincón de la casa

Pasamos de la cocina al vestidor. La pareja sigue dándose besos por toda la casa. "Qué pesados. Pero así somos", dice ella. Él se pregunta que si cambian pero ella dice que no. "Pegajosos", dice. Se van a desgastar. Luca asegura que le está dando tantos besos por el tiempo perdido, pero ella dice que nunca le ha dado tantos besos en lo que llevan de concurso. "Qué mentirosa", dice él.

El momento amor se corta porque Luca se va al baño a hacer "sus cositas".

Luis tiene claro que se va el jueves

Mientras en la habitación están melancólicos hablando del paso de por el programa y de la gente que han conocido y con los que aseguran tener amistad fuera, Luc ay Cris siguen con su demostración de amor. Aparece Luis y Cris dice que le va a dar pena la fiesta de hoy porque Luis lo va a pasar mal. "Lo va a vivir como si fuese la última", dice. Y Luca le pide que no piense en eso.

Sandra dice que aparte de amigos, ella se lleva algo mejor: a su pareja. Una pareja que entró rota y que poco a poco se fue formando en la casa. Luis comenta que entró con muchos miedos porque ha hecho mucha tele pero nunca un reality. "Salir es guay pero a nivel sentimental va a ser complicado", dice Sandra. La extentadora lo dice porque estará con su familia y no con Julen las 24 horas. "Me dormí la última porque mi cabeza no paraba", dice. Tiene miedo también de que Julen se vaya. Luis dice que al final el que está solo es él porque Gemeliers son dos, y las parejas se tienen los unos a los otros. Por eso está convencido de que los fans se han unido para ir a por él. Insiste en que lo que peor lleva es que se acabe el concurso.

La pareja sigue en la cocina dándose cariño. Deciden hacerle una bromita a Jesús: guardar las sartenes con el aceite que tiene preparado para el cachopo para volverle un poco loco y que se crea que no lo ha puesto.

Luis se emociona recogiendo sus cosas

Luis está en la habitación llorando. Sandra acude a abrazarle y le pregunta qué le pasa. "No lloro por irme, lloro porque se acaba...", dice. Luis está recogiendo sus recuerdos de la habitación y se ha venido abajo. "Te mueve todo. Es mucho tiempo", dice. Asegura que está bien y Sandra le dice que es una putada la situación. "Estoy bien pero no sé, ha sido ahora al estar solo y recoger todo", dice todavía con lágrimas en los ojos. Tiene un arsenal de cosas, hasta el mismo se sorprende de que parece un bazar y se ríe él solo.

Luis dice que prefiere recogerlo ahora para mañana poder disfrutar de la casa y estar más tranquilo. Tampoco quiere pasar hoy una mala noche, que tienen fiesta y, además, quiere pasárselo bien en la prueba semanal. Sandra mira algunos recuerdos que Luis tiene en la habitación.

Sandra dice que a ver qué pasa mañana. "Nada, va a pasar lo que tiene que pasar", dice él. Tiene claro que es él quien se va y lleva días con la cosa de que el programa se acaba ya. No le da pena el irse ni está mal por eso, si no porque no les queda nada dentro del concurso.

Cris y Luca repasan momentos de la Sala de la verdad

La casa ha vuelto a la tranquilidad. Jesús está en la cocina liado con la comida de hoy. Dani está en el salón junto con Sandra y Julen que están tumbados en el sofá. Comentan que han comprado las cosas para hacer sushi pero que a Julen no le gusta. Dani indaga un poco para que su amigo no tenga que hacerse nada a parte y descubren que con las gambas, el arroz y unos fideos, puede hacerle algo de comida japonesa.

En la cocina, está Cris hablando con Luca de su declaración de amor. Cristina le dice que le sorprendió porque él no es así. Siguen muy cariñosos, dándose abracitos, besos, picándose...

Jesús se sienta en el sofá y Dani le dice que le ve muy tranquilo para la cantidad de elaboraciones que tiene que hacer para el cachopo. Pero parece qe lo tiene todo bajo control. Veremos a qué hora comen.

Luis aparece por la cocina y Luca le cuenta cuando le pidió a Carlos Sobera que le preguntase a Cris cuánto quería a Luca. Cris dice que le dio mucha vergüenza. Luis se va a la habitación. Ellos siguen: "No has contestado", dice él. Ella se explica y el dice que sí que contestó. "Me haces pasar vergüenza", dice. Y le cuenta que cuando le dio el beso, estaba un poco enfadada.

Luca y Cris se comen a besos

El italiano coge a Cris por los aires y se la lleva al Cubo. Allí, se comen a besos sin parar. Está claro que la relación ha vuelto a su cauce y con más ganas que nunca.

Luego le dice Luca que nadie le quiere y Cris le insiste en que ha sido el Grinch. Se le ha quedado grabado porque luego lo vuelve a repetir. Todo de broma, claro. Y Siguen abrazándose y comiéndose a besos. Jesús aparece y hace como que le da una arcada. La pareja se ríe.

Luca, el elegido para los burpees

Cris sale disfrazada y decide que sea Luca el que haga los burpees. Le insulta y todo, está metidísima en el papel: "Entraste con muchos músculos y no te queda ni uno", le grita. Le dice que está hinchado que no se va a poder comer ni un turrón, que no va a tener regalos en su cumple porque nadie le quiere. Luca termina y repasa las cosas que le ha dicho Cris. "Era el Grinch no yo", se excusa ella. Luis no puede parar de reírse.

Pero Luca no está para risas porque cree que le ha salido una almorrana y se lo cuenta a los gemelos, que le dan un consejo: que se haga un "raspone" de vez en cuando. El italiano se mea de risa con la ocurrencia de sus compañeros.

¡Grinch!

Ya han terminado de hacer el tour por la casa viendo todas las pruebas que tienen que hacer. Como una de ellas consiste en decorar la pared con globos y demás, van hinchando ya algunos para luego no perder tanto tiempo. Julen ayuda a los gemelos a hinchar los globos pero se quejan de que son muy duros y no pueden atarlos bien. Julen amenaza con hincharlos mucho y los hermanos se asustan por si explota. "¡Ya bro!", le gritan. Para evitarse sustos, se van a la cocina a preparar la comida: cachopo. Les han dejado un inflador pero Dani cree que es mejor hacerlo con la boca.

La voz les dice que de momento no van a empezar, pero que para ir cogiendo ritmo... ¡Grinch! Así que Cristina se mete al almacén a cambiarse ropa para disfrazarse de El Grinch. Tendrá que buscar un compañero para que haga los burpees mientras ella le desanima. Les han puesto villancicos para entrar en el ambiente. Luca y Luis canturrean aunque el italiano no se lo sabe y hace ruidos raros.

Los niños de San Ildefonso

Una de las pruebas del calendario de adviento es cantar la lotería como lo hacen los niños de San Ildefonso. Comentan que cuando les toque cantar los 4 millones de euros, tendrán que ponerle emoción como lo hacen ellos. Luca no entiende por qué los niños lloran o se emocionan y entonces los compañeros le comentan que es una tradición, que es un momento en el que está todo el mundo pendiente de ellos y que llevan mucho tiempo preparándose para ese momento.

Repasan todas las casillas del juego

Han terminado de leer la prueba y están maravillados. "Es una fantasía de prueba", dice Dani. Terminan de preguntar dudas para tener todo claro. Repasan casilla por casilla para que entiendan todas las pruebas o retos que hay repartidos por la casa. Es maravilloso que con la que hay liada, no se hayan enterado de nada cuando lo han preparado todo.

Están haciendo un tour todos juntos para ver qué hay en cada casilla. A Sandra le encanta también la prueba. "¡Qué guay!", dice. Hay decoración, disfraces, aglomeraciones propias de la Navidad, el muérdago, la carta a los Reyes Magos... de todo.

Leen la prueba semanal

Recogen las instrucciones de la prueba y proceden a leerla. Dani y Luis toman la voz cantante y se sorprenden de lo largo que el folio donde lo explica. "Es flipante, me encanta es superdivertida", dice Dani muy ilusionado. Es un calendario de adviento que recorrerá estos días como si fuese un juego de la oca y tendrán pequeños retos como comerse las uvas o celebrar la lotería. Cada ganador tendrá su premio: dos dulces. Esto es lo que más ilusión les hace.

Cada partida la harán 3 personas y una cuarta que hará de arbitro, que se ocupará de las instrucciones e infracciones. Tendrán un máximo de 5 minutos para realizar los retos. Si no completan la tarea con éxito, tendrán que retroceder 4 números. El Grinch también tiene su espacio, así que cada vez que digan su nombre, tendrá 5 minutos para vestirse y elegir a una persona que tendrá que hacer 10 burpees. Es decir, un ejercicio de saltar y hacer una flexión. Mientras, El Grinch tiene que desanimarle. Cristina, que es El Grinch, no quiere desanimar a nadie pero le encanta mandar burpees. Una de cal y una de arena.

La lotería y los regalos de Navidad

Mientras algunos terminan de desayunar, Dani y Julen están en el sofá melancólicos hablando del momento de la salvación de los hermanos y del equipazo que hay detrás de este programa. El grupo de la cocina hablan de la lotería de la Navidad. Cris y Luis dicen que les encanta y que juegan con mucha ilusión. Luis hace repaso de todos los décimos que compra. "Cuando me doy cuenta...", dice. Luca le pregunta que cuánto se ha gastado pero Luis no contesta. Jesús cuenta que en Utrera tocó el año pasado a mucha gente.

Sandra está en el salón también con Dani. "Estoy agobiada", dice ella. Dani no puede parar de decir que todo es una locura, que no se imagina el momento de volver a casa y ver qué ha pasado. Sandra dice que ella tampoco quiere saberlo y Dani lo que quiere es empaparse de música para cuando le toque componer, saber que se lleva. Han estado tres meses dentro, tampoco... Y dice que quiere irse de compras con su novia y Sandra a comprar los regalos de Navidad. "Mi madre seguro que ya tiene los regalos", dice. Dani dice que no quiere nada y Sandra que su regalo es su familia. El cantante apoya esa idea y que solo quieren hacerse algún autorregalo. Sandra algo más material, Dani prefiere un spa o algo así.

Luca y Cris no pueden separarse

Cristina y Luca siguen sin poder despegarse. Ella le abraza por la espalda mientras él está sentado tomándose un zumo de naranja. El italiano le da un beso en la mejilla y ella se acerca para darle un beso en la boca. Hablan del desayuno y parece que ha llegado la reconciliación total por cómo se hablan, se miran... y por lo felices que están con el resto.

Siguen dando rienda suelta a su amor y mientras las tostadas se hacen, se comen a besos. Cristina le dice que si puede estar así siempre con ella. La reconciliación ha venido fuerte.

Desayuno todos juntos

Julen cuenta que se ha ido al sofá a dormir porque le dolía la tripa y ante una urgencia de ir al baño, pues ha preferido estar más cerca del baño.

En el baño, Luca y Cristina se abrazan en la ducha. Luego él se va y la deja duchándose. Dani y Luis están en el baño también. Luis se percata que por la casa hay regalos.

Los chicos preparan el desayuno tranquilamente mientras charlan tranquilamente y están de risas comentando la música. Luca ha vuelto a gritar, así que eso solo puede ser signo de que está feliz. Imita expresiones que dice Luis y este se queja de que se ha aprendido todo como un loro. Es más, le imita y Luis no puede aguantarse la risa. "Cómo lo memoriza rápido. Todo lo que sea maldades y guarrerias...", dice Luis.

Cristina aparece por la cocina y no puede dejar de abrazar a Luca y él la busca para darla un beso. "Soy feliz", dice el italiano.

Se van levantando

La música ha dejado de sonar y los chicos poco a poco se han ido levantando. Todavía quedaban algunos rezagados como Dani y Jesús y la voz les ha pedido por favor que se vayan levantando. También le ha pedido a Julen, que está en la cocina, que no toque nada. Por lo que vemos, hay regalos de Navidad por la casa y decoración de lo que, imagino, será la nueva prueba semanal.