Cogiendo fuerzas
Con el personal dormido hace un buen rato después de unos intensos primeros días, me despido ¡Buenas madrugadas!
Buenas noches amigos. La entrada de Álvaro a la casa ha revolucionado la casa de los secretos. No recuerdo ninguna edición de algún reality donde la entrada de un concursante nuevo alterase tanto las cosas en tan poco tiempo como ha ocurrido anoche. En menos de 24 horas el último en llegar las ha tenido de todos los colores con varios de sus compañeros. Pero con quien tuvo el mayor encontronazo fue con Héctor, que le intentó quitar el huevo de la inmunidad por las bravas. Con este panorama, conectamos con la casa.
Con el personal dormido hace un buen rato después de unos intensos primeros días, me despido ¡Buenas madrugadas!
La casa en absoluto silencio con todos los concursantes dormidos como angelitos.
Con el dormitorio a oscuras, Cora cuchichea con Brenda. Parece que ya no tienen claro lo de nominar a Álvaro después del cambio de actitud de este. Tienen un dilema grande porque tampoco quieren subir a otra persona como Rafa a la palestra por la llegada del nuevo concursante. Cora dice que ahora se lleva mejor con Rafa y piensa en darle un punto a Héctor. Por otro lado, hemos visto como Hector se ha ido a dormir solo, sin la compañía de Elena. Veremos cuánto tardan en meterse juntos debajo de las sábanas. En fin amigos, que ya estamos en blanco y negro. Anoche se acostaron pasadas las siete de la mañana y el cansancio les ha hecho mella.
Cora le cuenta a Adrián en el baño que Álvaro ha cambiado su actitud. El muchacho dice que tiene claro que sus tres puntos van a ir a por el último en llegar. "Sería muy hipócrita que no se los dé a él que lleva dos días y sí a alguien que lleva cinco". Además, añade como argumento la que se lió ayer con su llegada.
Elena dice que está encantada con que Alberto sea un chico detallista: "Yo también lo soy cuando estoy inspirada", le informa la chica. Después se achuchan un poquito y se preparan para irse a dormir. Parece que la cosa marcha bien.
En el baño, Brenda le hace un traje a Carmen: "Es una melodrama, me agotoa. Es tan cria... No sabe gestionar sus sentimientos'. Carlos se expresa en la misma línea y avisa que ya no le va a dar más oportunidades. Hasta Álvaro se apunta al bombardeo: "A mí es la que más despistado me tiene".
Alitzne departe con la 'pareja' de la casa. Asegura que está muy bien sola, sin pareja. Afirma que no siente ni siquiera deseo por alguien. "Para eso me tendría que enamorar", sentencia. Por su parte, Elena dice que ella también estaba bien sola, pero no se cierra nada. Lo suelta delante de su ligue, Alberto.
Álvaro asegura que su cambio de actitud no obedece a ninguna estrategia. Brenda afirma que le cree, aunque es sospechoso que una vez que le han quitado la inmunidad haya decidido acercarse al resto. "Lo sé, pero el tiempo lo dirá", sentencia Álvaro.
Älvaro ya habla como si se hubiera zampado a Bambi: "Quería disociar el juego de las personas, pero no puedo. No entiendo cómo ha podido ocurrir todo en un día". El muchacho asegura que cuando vio a Brenda a llorar le "ha llegado al alma". "Tú me entras así en la calle y no hay una segunda oportunidad porque entraste a joder y eso lo sigo manteniendo". La barrendera esotérica explica que debido a su reciente filosofía de vida ha querido entender las razones de Álvaro de entrar como un elefante en una cacharrería. "Solo te puedo dar las gracias", reacciona Álvaro.
Álvaro saca la bandera blanca. Confiesa que venía con la intención de manipular "sacando lo peor de los demás" para ganar y librar muchas batallas psicológicas, pero le ha "sobrepasado la experiencia". Álvaro confiesa que siempre se pone del lado del antihéroe, pero quiere rectificar. "Ya no voy a ir con animadversión a joder", informa. "Hoy vas a dormir más tranquilo. Si te liberas y sacas de ti el lobo malo, te va a venir bien", concluye Héctor.
Álvaro ha cambiado completamente su actitud. Alberto le dice que su fallo ha sido entrar al trapo de cada crítica "y eso complica mucho la convivencia". El último en llegar concede y se muestra dispuesto a cambiar. Por su parte, Héctor confiesa que ayer se pasó toda la noche sin dormir, pendiente de Álvaro, para quitarle el huevo por el mosqueo que tenía con él. Por otro lado, Alberto ya rodea con su brazo a Ellena como si fuera su novia de toda la vida.
Héctor y Álvaro siguen avanzando para su reconciliación. Él último en llegar da completamente su brazo a torcer con el canario: "Tienes una de las capacidades de empatía más grande de toda la casa. Simplemente que te sientes aquí después de todo lo que he generado dice mucho de ti. Reconozco de aquí a Lima que eres buena persona". Héctor sigue en su tono de couch, pero esta vez firma definitivamente la paz: "Yo defiendo el amor y ataco el egoísmo. Por mi parte fluiremos.....Que digas que soy una buena persona es un regalo para mí". Acto seguido se dan un pequeño abrazo. La paz ha llegado a la paz de los secretos.
Héctor y Álvaro sellan una mini tregua. Álvaro confiesa que no quiere irse con mal sabor de boca sin tener la oportunidad de conocer a sus compañeros. Héctor recoge el guante, aunque a medias: "Has hecho un esfuerzo increíble por ganarte la nominación de todos....Tú sacaste mi peor parte... Yo intento sacar mi mejor parte porque la vida es un regalo.. Hay gente que se muerte todos los días...". La charla transcurre con buen tono. Héctor tira mucho de speeches típicos de couching emocional, Recurre a muchas frases típicas de los libros de autoayuda en oferta. "La injusticia la combato con el corazón", suelta con voz solemne. Álvaro entra al trapo: "Si todo fuera justo, todo sería aniquilador. Necesitamos las injusticias para superarnos", responde. "Hay una barrera que no la voy a quitar. Ha ciertas lecciones que todavía tienes que aprender", concluye Héctor.
Elena confiesa a Alitzne que bebe los vientos por Alberto: "Si no me gustase, no haría nada. Yo quería pasar al principio desapercibido...Le había prometido a mi madre que no haría nada, pero se ha dado así. No lo he ido buscando. Voy a vivirlo. No puedo hacer nada. Voy a Seguir para lante y a ver qué pasa", concluye.
Nissy está continuamente detrás de los pasos de su hermana: "Laila, no te sientes en la mesa que se va a romper", le advierte.