El hijo de nuestro colaborador reconoció que sus sentimientos hacia su padre estaban fríos y aletargados. Le ha echado en falta sobre todo para determinados momentos con con su hija (nieta de Kiko). Hace tres meses trató de hablar con su padre por teléfono, pero nunca le devolvió la llamada. "Percibo que se ríe de mí" lamentaba Diego.