Mientras hablaban de los asuntos de separación de Gustavo González, María Patiño dio a entender que estaba ocultando datos para proteger a otras personas. Unas formas que no han sentado nada bien al presentador, que se ha levantado y las ha llamado "brujas" delante de toda España. A partir de ahí se ha desatado una guerra de acusaciones que ha acabado con María Patiño llorando.