La Gala Final de 'Supervivientes 2011' estuvo cargada de grandes momentos, unos más buenos que otros. El mejor fue el triunfo de Rosa Benito, que a punto estuvo de ser empañado por su discusión con Amador, su marido, por sus celos hacia Montalvo.
Para aclarar todo lo sucedido en la gala, Rosa dio sus primeras declaraciones en exclusiva a 'Sálvame Deluxe', donde además de asegurar estar "más feliz que nunca" por su triunfo y reconocer que "jamás pensé que podría llegar tan lejos en el concurso", comentó algunos de los temas que han situado en el centro de atención.
Sin duda, la incógnita más importante por desvelar era la de si ya estaba al corriente del trágico accidente sufrido por Ortega Cano y en el que Carlos Parra murió. "Me enteré en el camerino, me quedé muerta. Entendí entonces muchas cosas de lo de Aída, no se puede ser tan dañina, porque no sabía nada y cuando me enteré entendí porque ella me hacía esas preguntas", comentó Rosa.
La ganadora de 'Supervivientes' añadió que no había podido hablar con Ortega Cano porque tenía el móvil apagado, pero que sería lo primero que haría al día siguiente y que irá a verle en cuanto pueda. Respecto a la decisión de su familia de no contarle nada, Rosa aseguró que está muy agradecida de haber podido disfrutar del concurso por completo, ya que de haber conocido la noticia no podría saber qué habría decidido:
"Yo tengo que decir que Amador respetó mi ilusión de estar en 'Supervivientes', que yo quizás no hubiera venido porque la salud de mi cuñado estaba en manos de los médicos y de Dios, y el que yo hubiera venido no habría conseguido nada. Entonces, estoy contenta de que no me lo hubiera dicho porque no sé la decisión que hubiera tomado, pero creo que el concurso no lo hubiera abandonado".
Respecto al fallecimiento de Carlos Parra, Rosa quiso tener unas palabras para la familia y transmitirle su pesar: "Tengo que decir que una muerte es horrorosa y más cuando es en esas circunstancias tan críticas. Por supuesto, a su familia le doy mi más sentido pésame".
Otro de los temas más importantes en relación a la Gala Final de 'Supervivientes' fue la riña que Rosa y Amador tuvieron en directo mientras comentaban la especial relación de la ganadora y Montalvo. Más allá de lo que la gente pudiera interpretar por lo sucedido, la concursante quiso quitarle hierro al asunto y explicó qué le llevó a callar a su marido delante de todos:
"No ha habido ningún problema, ese era mi momento, yo no sabía nada de lo que se ha liado en España y me duele que hayan querido hacer daño a mi marido porque se podían haber metido conmigo, decirme 'qué mala superviviente', 'qué mala compañera', 'lo está haciendo fatal', pero no entiendo por qué siempre se le quiere hacer daño al débil. Yo no sabía nada, no sabía por qué Amador tenía esa reacción y creo que es injusto todo lo que se ha querido hacer, para hacer daño gratuitamente".
Tan bien aseguró que estaba con su marido que incluso terminó por tomarse a broma todos los comentarios: "Voy a tener una tercera boda y no tengo otro niño porque ya se me ha pasado el arroz". La broma acabó tan pronto como el reportero le preguntó por las supuestas amantes de Amador. Rosa aclaró, muy seria, que le dolía mucho ese tema, porque precisamente la joven con la que le ha relacionado es su sobrina: "Lo que me parece injusto y dañino es que se digan tantas mentiras sin antes averiguar realmente quién es esa persona. Mi marido lo ha pasado muy mal, yo me enteré ayer de todo, por eso ahora entiendo la reacción que tuvo en plató".
Jorge Javier, testigo directo de la discusión entre Rosa y Amador
El presentador contó, también en exclusiva para el 'Deluxe' su parecer y su impresión sobre la riña de Rosa y Amador en la Gala Final de 'Supervivientes'. Para el presentador la actitud del marido de la ganadora no fue la adecuada, ya que según él debía haber ido preparado para que a su mujer le preguntaran cualquier tipo cosas. "A Rosa se le debía preguntar si había estado enamorada de Montalvo, era la pregunta que todo el mundo quería escuchar y Amador debía haber estado preparado y no hacer ningún tipo de comentario que descoloque a Rosa. Yo lo pasé fatal, porque me pareció la actitud de Amador horrorosa", declaró.
Algunos colaboradores apuntaron que entendían los celos de Amador, a lo que el presentador les replicó asegurando que Rosa estaba totalmente de broma y que tanto la actitud de Amador como las miradas, sobraban. El enfado de Jorge Javier aumentó cuando, mientras Raquel Sánchez Silva estaba entregando el cheque con los 200.000 euros de premio a Rosa, se acercó a Amador para calmarlo y él le contestó mal:
"Yo me acerqué y le dije que se lo tomara a broma y que era una bobada. Él, de muy malas maneras, me dijo 'Ya está bien, tienes que hacer estas bromitas hasta el último momento'. Entonces Rosa, con muy buen tino, le dijo 'Amador, basta, no me busques'. Yo me cabreé entonces muchísimo, porque no me merecía que Amador me hiciera pasar ese momento en una gala tan importante, porque en 'Sálvame' le he echado muchos cables. Es que Amador se cargó el hilo argumental del último tramo de la gala con sus miradas, sus gestos y sus comentarios".
Pero, según el presentador, las aguas pronto volvieron a su cauce. Aunque confesó que salió disparado de plató tras finalizar la gala para no encontrarse en con Amador, añadió que poco después, cuando estaba con Rosa en su camerino, el hermano de Rocío se apresuró a pedirle disculpas por el tenso momento que había propiciado. Además, Jorge Javier quiso aclarar también que, tanto para él como para la pareja, todo había quedado en una anécdota sin más y que tras las disculpas, el tema se olvidó:
"Cuando entró en el camerino, cosa que le honra y le hace grande, se disculpó y se dio cuenta de que había metido la pata. Por eso no se lo voy a tener en cuenta, porque estaban todos nerviosos, con la tensión, tres meses separados. Sé que se disculpó de corazón, se quedó rayado porque sabía que había metido la pata y yo le dije que no lo tuviera en cuenta. Lo que vi en ese camerino, aunque no sé qué va a pasar, es una excelente relación entre Rosa y Amador, eso se quedó en una anécdota, sin más trascendencia, fue fruto de los nervios y la tensión. Además, vi como se morreaban delante de mí. Yo he visto a una pareja muy enamorada".