El diez de marzo de este año fue la última vez que Mila Ximénez colaboró en ‘Sálvame’. Llegó un poco tarde y Paz Padilla le preguntaba cómo estaba nada más llegar: “Bien, bien…” nos decía y le preguntaba a Kiko Hernández, porque siempre le pasaba algo y temía que se lo contagiara.
Fue la Mila de siempre: intervino en cada tema, se posicionó del lado de Kiko Rivera y fue tan arrolladora como siempre, protagonizando otro de sus demoledores alegatos.
Pero además, al final del programa repartió 10.000 euros porque la tarta que escogió la ganadora del concurso del día llevaba su rostro y escondía la cifra más alta. “Un beso cariño, disfruta”, decía ella celebrando la noticia.