María Jesús Ruiz vio cómo en apenas minutos en 'Sálvame' su relación se desvanecía. Ante una foto, reconoció que tiene nuevo novio, Curro, el chico que le llevaba las redes sociales. Sin embargo, 'Sálvame' había hablado con Yolanda, quien dice estar casada actualmente con él. La modelo pasaba de la duda a la negación y viceversa y acababa el programa entre lágrimas.
Todo continuó pocos minutos después, en el taxi camino a casa. María Jesús lo compartió con Laura Fa y fue entonces cuando recibió una llamada de un teléfono fijo que no conocía: era Yolanda. La modelo hablaba con ella con el altavoz mientras Laura grababa la llamada y se quedaba sin palabras.
Yoli le preguntaba si son pareja y la modelo si están casados: “Yo estoy casada con él y estamos buscando hijos”, le responde ella. Sin embargo, a María Jesús le ha dicho que está divorciado y que le va a mandar la sentencia de divorcio.
Hasta ese momento parecen dos personas enterándose de que su pareja les engaña, pero Yoli daba un paso más acusando a María Jesús de haber hablado con ella en otras ocasiones. Es más, le habría prometido que ella respeta a Curro y que Curro la respeta a ella. La aludida lo negaba todo y exigía las capturas de pantalla donde, se supone, ella ha escrito eso: “Mi mano no ha marcado eso, pondré en tela de juicio que él haya cogido mi teléfono y haya escrito eso”.
Entonces llegaba un momento de la conversación en que Mª Jesús dudaba, no sabía si realmente estaba hablando con Yolanda, tampoco si es verdad que están casados... Pero ella le daba el nombre de sus dos cuñadas, a quienes Mª Jesús conoce, y se quedaba a cuadros. Igual de sorprendida que cuando Yoli le dice que Curro está en esos momentos en casa. Decía que no podía ponerse porque estaba en el baño pero, minutos después, decía a Mª Jesús que no colgara, se le escucha decir a alguien: "Habla, habla" y una voz de hombre dice "sí, madre", dos palabras que han sido suficientes para María Jesús:
"¿Curro?", preguntaba la modelo
"Sí", respondía él.
"¿Eres tú?", insistía ella... y él colgaba. La modelo se tapaba la cara con las manos y es que lo tenía claro: era él.