"Tú sabes que yo no he sido. Estoy aguantando mensajes de gente insultándome cuando yo no tengo nada que ver", así de claro quiso zanjar el problema con un texto en redes sociales. Sin embargo, pese a aclarar todas las dudas, quiso mandar un dardo al terminar la frase: "Sigo callado".
De esta forma ha querido mostrar el hijo de Isabel Pantoja que no tiene ningún tipo de problema con su prima, incluso ha acompañado el texto con una tierna foto de los dos dándose un beso. Anabel no ha dejado que el misterio continúe y ha respondido rápidamente a Kiko Rivera: "No pondría nunca en duda, es más sigo manteniendo que estás al margen de todo esto. Siempre estás ahí cuando más te necesito. Así que eso es lo único que nos vale".
Al parecer, la colaboradora había recibido un mensaje durante la llamada en directo de su tía al programa y el colaborador Kiko Hernández transmitió el contenido en directo: "Le decían sólo te mueve el dinero, podrías haberlo parado, no lo has hecho, no me vuelvas a llamar en tu puñetera vida. Olvídate de mí. Firmado: Kiko Rivera”. Alterada, Anabel se habría defendido ante su tía y es que siempre ha tenido una magnífica relación con su primo Kiko: “Estaba desconsolada”. Luego, durante el transcurso del programa, la presentadora Nuria Marín se preocupó por el estado de la Pantoja al verla con los ojos rojos y llorosos.
Un vídeo significativo fueron las imágenes que 'Sálvame' mostró en inédito el pasado martes. En ellas se ve claramente que, durante la publicidad del programa, Anabel Pantoja se acerca al teléfono para decirle de muy buena manera a su tía que dejara de hablar, "que ya está bien". Poco después la artista colgaría a Kiko Hernández y Nuria Marín. Sin embargo, la colaboradora no paraba de recibir mensajes en su teléfono que le hacían tener un gesto preocupado y algo nervioso a la vuelta de la publicidad.