Gustavo González, roto tras las informaciones sobre el pasado de su amiga

Gustavo González ha negado una y otra vez que haya tenido una relación con una íntima amiga de su mujer, alguien del grupo llamado 'El Caloret'. Sin embargo, la fuente de Kiko Hernández se ha mantenido firme en su información y ha enviado las pruebas al colaborador de 'Sálvame'.

Se trata de conversaciones de whatsapp en las que la amiga en cuestión se muestra indignada por su relación con María Lapiedra y se declara engañada: "Menudo hijo de... mentiroso de... que me ha mentido siempre, a mí y a todos (...) Ese a todos nos engaña,siete años con María Lapiedra, doble relación. Me duele hasta la cabeza, llevo mil pastillas en el cuerpo, no me lo quito del a cabeza".

La amiga de Gustavo asegura que las conversaciones están manipuladas

Sin embargo, según la amiga de Gustavo González, todo es "mentira". El colaborador ha tenido una agria discusión con ella y con su marido, quienes han sido sus amigos, y cree que su relación está rota. "Está destrozada, fuera de sí", nos ha transmitido el colaborador pero ¿cómo explica las conversaciones a las que ha tenido acceso Kiko Hernández? Según la amiga de Gustavo, están "manipuladas".

Además, Gustavo ha dejado claro que su exmujer no tiene ninguna duda con esta historia: "confía en mí y confía en ella".

Pero lo peor ha llegado con la conexión en directo con Canet. Desde allí, Sergi Ferré nos ha contado que la familia de la amiga de Gustavo está indignada. El reportero ha reproducido las palabras del padre, que espera que Kiko Hernández no pase con sus hijas lo que él está pasando. Este comentario ha enfurecido al colaborador que ha respondido con informaciones sobre el pasado de la amiga de Gustavo: "si nos metemos, nos metemos, espero que algún día mis hijas se casen y si se casan, que sus maridos no las pillen como pilló a su hija su exmarido".

"No te están contando la verdad, te estás pasando", decía Gustavo echándose las manos a la cabeza y acababa por romperse, sintiéndose responsable: "Estoy roto con lo que acabas de decir, es una tía maravillosa, no sabéis el daño que se provoca diciendo lo que ha pasado en su vida".

"Es una canallada", se quejaba Gustavo y Kiko Hernández daba un paso atrás: "Retiro lo que he dicho y pido disculpas a quien proceda".