Gustavo González fue quien no puso sobre la pista de que algo le sucedía a Antonio Montero. Finalmente, el protagonista de la información acabó explicando que ha tenido que ser intervenido para extirparle un tumor de su pierna izquierda.
Antonio se lo había contado a Gustavo y él se lo había contado a algunos compañeros a pesar de que su amigo le había pedido que le guardara el secreto porque solo lo sabía su gente más cercana. Le llamaba “bocazas”, pero le perdonaba automáticamente.
Tras días de polémica, Gustavo vuelve a ‘Sálvame’ reconociendo su responsabilidad pero negando la traición: “He sido un bocazas, he decepcionado a Antonio, pero no soy un traidor. Cometí una indiscreción y lo único que me importa es conservar la amistad con Antonio”.
“Es un tío generoso, súper paciente, seguramente no merezco la amistad que me tiene pero en ese sentido te juro que me siento un privilegiado”, ha añadido el colaborador defendiéndose de los ataques de sus compañeros.